Paradójicamente, a sus ocho años de edad, Yandel Márceles Rivera afronta el más grande reto de su vida: luchar por su vida.

Todo por cuenta de un sistema de salud que, antes de brindar tranquilidad, lo que genera es una verdadera tortura, tanto para adultos como para niños.

Es la situación que está padeciendo Yandel, cuyo nombre fue escogido por sus padres, Jenner Márceles y Kimberly Rivera, por el conocido cantante de Puerto Rico del género de reguetón y pop latino.

Tras sufrir algunos síntomas, sus padres acudieron a un médico particular quien le diagnosticó un grave problema: hígado y bazo de persona adulta.

Ante ello, el viernes 5 de este mes decidieron llevarlo al Paso de Simón Bolívar, donde los especialistas indicaron que Yandel sufría de Leucemia.

Por esta razón se decidió su traslado al Camino Universitario Distrital Adelita de Char. Sin embargo, debido a su estado complejo, también se decidió su remisión a la Clínica Bonnadona Prevenir, a las 12 de la noche del sábado 6 de mayo.

Allí permaneció hasta el martes en la mañana, cuando sus familiares, de manera inexplicable, fueron notificados que no lo podían seguir atendiendo en ese centro asistencial “porque no había quien cubriera los gastos de hospitalización”.

Realmente, Yandel es beneficiario del Sisben y en esa clínica manifestaron que no existía con ellos ningún convenio para seguir atendiendo a Yandel, de acuerdo con lo manifestado por su tía, Jenifer Solano.

Fue por ello que desde la Bonnadona Prevenir lo remitieron a la ESE Cari de Alta Complejidad, desde la mañana del martes 9 de mayo.

“Allí lo tienen con oxígeno, se ahoga para hablar, está hinchado y no puede abrir un ojito por la hinchazón”, comentó su tía Jenifer.

En este “paseo”, a Yandel se le ha complicado su estado de salud. “La hemoglobina la tiene en 7 y en la tarde de este jueves hubo que hacerle transfusión de sangre”, agregó su familiar.

“No entendemos porqué la Clínica Bonnadona, con todo el sistema requerido no le siguió brindando la atención y lo trasladó a El Cari, donde las instalaciones no son las adecuadas y no se le está prestando la atención requerida”, señaló su tía tras cuestionar el hecho de que haya sido remitido por el solo hecho de que “no había quien cubriera sus gastos”.

Por ello, considera que es una forma “de jugar con la vida de la gente, especialmente cuando se trata de niños”.  

Lo cierto es que Yandel, un humilde niño residente en el barrio San Luis, al suroccidente de Barranquilla, hoy registra una complicada situación de salud, debido a la precaria atención que ha recibido en los centros asistenciales, en otro típico y penoso caso de “paseo de la muerte”.