El aislamiento de las naciones del Pacífico Sur frena al devastador Covid-19
El aislamiento geográfico de las pequeñas naciones insulares de Pacífico Sur ha servido de muro para frenar la llegada del coronavirus.
El aislamiento geográfico de las pequeñas naciones insulares de Pacífico Sur ha servido de muro para frenar la llegada del coronavirus a esta región con el menor número de casos del mundo y donde, según los expertos, el Covid-19 podría suponer un desastre.
"Su aislamiento geográfico ha sido siempre una maldición para las islas, donde el trasporte aéreo es difícil y costoso. Pero, ahora se ha convertido en su tabla de salvación", declara a Efe el doctor Colin Tukuitonga, excomisionado de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Nueve países: Vanuatu, Kiribati, Tonga, Samoa, Islas Marshall, Nauru, Palaos, Islas Salomón y Tuvalu permanecen libres del Covid-19, cuya hipotética llegada según advierten los expertos sería devastadora debido al precario sistema de salud que disponen.
"Sus sistemas de salud son frágiles y con pocos recursos, a menudo hasta sin medicamentos esenciales. Con limitado personal, sin UCI o respiradores artificiales. Muchas islas lejos de las capitales o en las aldeas rurales carecen por completo de asistencia médica", apunta Tukuitonga, director general de la Comunidad del Pacífico, con sede en Niue.
Estos nueve países, compuestos en su mayoría por archipiélagos con decenas de diminutas islas y atolones, tienen una población en conjunto de poco más de 1,4 millones de habitantes, siendo Tuvalu (con 11.192 ciudadanos) la menos poblada.
No obstante, sí se han confirmado 16 casos en Fiyi, el país más poblado de la región con 900.000 habitantes, y en los territorios franceses de ultramar de Nueva Caledonia (18 enfermos y 1 deceso) y la Polinesia Francesa (51 infectados).
También se han detectados casos en los territorios no incorporados de los Estados Unidos de Guam e Islas Marianas (130 casos y 4 muertos y 6 infectados y 1 fallecido, respectivamente), en el Pacífico Norte.
La carencia de laboratorios para analizar las pruebas que detectan el Covid-19 es otro de los obstáculos, pero el doctor opina es "poco probable" la existencia de casos ocultos.
Aislamiento geográfico
Rodeadas por la inmensidad del océano Pacífico y a miles de kilómetros de distancia de sus vecinos más próximos, estas naciones insulares actuaron con rapidez y determinación para frenar en seco la llegada del virus.
Los gobiernos de la región suspendieron a principios de marzo las llegadas de todos los aviones procedentes de extranjero y negaron los permisos de atraque a los cruceros, a pesar de su alta dependencia económica del sector turístico, que en países como Vanuatu supone el 40 % del PIB.
Dentro de sus fronteras han prohibido los eventos de masas, cerrado escuelas y promocionado las políticas de distancia social, además de interrumpir las conexiones domésticas.
Fiyi ha impuesto una cuarentena obligatoria en todo su territorio, mientras otras naciones, como Islas Salomón, han optado por establecer el toque de queda nocturno.
"El confinamiento en muchas de las islas es severo. Necesitan mantener al virus fuera del país porque no podrían hacer frente a un brote", remarca el experto.
EFE