El presidente de la Cámara de Representantes, David Racero, aplazó para este lunes 12 de diciembre la votación en cuarto debate de la reforma política, ya que algunos parlamentarios denunciaron que hay vicios en la ponencia.

La polémica se suscitó porque se incluyeron dos artículos para la plenaria de Cámara que habían sido rechazados en segundo debate en la plenaria del Senado.

La votación estaba prevista para ayer martes, y el aplazamiento servirá para que estos días sean utilizados a efectos de establecer si hubo o no errores en el trámite. 

Así las cosas la reforma política entra en “cuidados intensivos”, porque este año solo queda la otra semana para lograr su aprobación en cuarto debate, ya que es una reforma constitucional. 

El período legislativo finaliza este 16 de diciembre, y si el proyecto logra su aprobación en cuarto debate seguirá en tránsito para cumplir, a partir del 16 de marzo del 2023, los cuatro debates restantes.

El representante Julio César Triana, de Cambio Radical, partido declarado independiente frente al Gobierno, dijo que “las normas en Colombia determinan que lo que se niega en la Comisión no puede meterse en la ponencia que se lleva a plenaria; eso está respaldado por muchas jurisprudencias de la Corte Constitucional”.

El proyecto de reforma política fue presentado por el Gobierno nacional y, por obvias razones, es respaldado por su coalición. 

Sin embargo, inclusive en este bloque se oyeron voces que coinciden en que habría errores en la ponencia, y que si se vota así la reforma podría caerse más adelante en el examen de la Corte Constitucional. 

La representante Katherine Miranda, de Alianza Verde, colectividad de la coalición de gobierno, dijo que se cometieron “errores gravísimos en la presentación de la ponencia. Es un irrespeto a la Comisión y puede presentar vicios de trámites”.

Por su parte, Heráclito Landínez, del Pacto Histórico, coordinador ponente, aseguró que la ponencia no presenta errores y atribuyó esta discusión a una supuesta estrategia de la oposición para evitar la aprobación del proyecto.

“Construimos una ponencia con el Gobierno, con el Ministerio del Interior, con constitucionalistas, con la Secretaría General de la Comisión Primera y con el voto afirmativo de 32 de sus miembros. Es decir, no hay un margen de error. La oposición lo que quiere es evitar que la reforma continúe, no quieren las listas cerradas, no quieren la participación de las mujeres, y por lo tanto no quieren la reforma política”, enfatizó Landínez.

El presidente de la Cámara, David Racero, decidió aplazar la votación de la reforma para el próximo lunes, cuando se espera que estén aclaradas las dudas.

“Como presidente no voy a asumir el riesgo de adelantar una discusión de votar y sacar adelante esta reforma para que después se caiga por vicio procedimental”, dijo el representante Racero.