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Un bloqueo inaceptable para la innovación en Colombia

Los empresarios y Universidades enfrentan un retroceso alarmante en el apoyo público a la innovación. La ausencia de la convocatoria de incentivos tributarios para proyectos de ciencia, tecnología e innovación —que no ha sido lanzada por el Ministerio de Ciencias (Minciencias)— pone en grave riesgo no solo nuestra competitividad, sino también el desarrollo económico y científico del país.

La reforma tributaria de 2022, dejó una preocupante falta de coordinación institucional. El cambio que trasladó al CONFIS la responsabilidad de definir el cupo máximo de deducción tributaria, tarea que antes realizaba el Consejo Nacional de Beneficios Tributarios, ha generado retrasos inaceptables.

En el 2023 el CONFIS solo pudo cumplir con esta tarea en el mes de Noviembre abriendo una convocatoria de solo una semana.

En el 2024 no se ha definido el monto y ya se está acabando el año.

El resultado: cientos de empresas innovadoras en una situación de incertidumbre absoluta.

Mientras tanto, el cruce de culpas entre Minhacienda y Minciencias agrava el problema. Por un lado, Minhacienda acusa a Minciencias de no formalizar las solicitudes o, incluso, de retirarlas en momentos clave. Por otro lado, Minciencias asegura haber entregado la información varias veces, enfrentando constantemente nuevas exigencias burocráticas. Este enfrentamiento es inaceptable y denota una falta de liderazgo que afecta a todo el ecosistema de innovación del país.

La consecuencia de esta inacción es devastadora. Sin la convocatoria, no se puede evaluar ni aprobar proyectos antes de finalizar el año, como lo exige la ley. Esto implica que las empresas no tendrán acceso al principal incentivo para invertir en innovación, lo que frena de manera drástica el desarrollo tecnológico y empresarial de Colombia. La competitividad del país ya está en juego, y cada día que pasa sin solución nos aleja más de la posibilidad de construir un futuro basado en el conocimiento y la innovación.

El daño no es solo económico; también es simbólico. En un mundo donde la innovación es un pilar fundamental del desarrollo, enviar este mensaje de indiferencia y desorganización a las empresas y a la comunidad científica mina la confianza en las instituciones y en el compromiso del país con el progreso.

Por ello, es urgente que el Gobierno Nacional tome medidas inmediatas. Primero, el CONFIS debe definir de una vez por todas el cupo de deducción tributaria. Segundo, Minciencias y Minhacienda deben dejar de lado las excusas y trabajar de manera coordinada para resolver este bloqueo. Finalmente, la convocatoria debe abrirse antes de que termine el año, garantizando que las empresas puedan presentar sus proyectos y acceder a los incentivos que necesitan.

El costo de la inacción es demasiado alto. Cada día de retraso es un paso atrás en la construcción de un país más competitivo, más innovador y más preparado para los desafíos del siglo XXI. Colombia no puede permitirse frenar su innovación. No podemos tolerar que la falta de liderazgo y visión siga siendo un obstáculo para el avance de la ciencia, la tecnología y la innovación, los pilares sobre los cuales debería estar construido nuestro futuro.