La historia de la falsa bomba en el centro comercial Miramar de Barranquilla tiene versiones encontradas. El comandante operativo de la Policía Metropolitano, coronel Hugo Molano, señaló que a la mujer que portaba el artefacto se lo habrían colocado desde su casa, ubicada en el barrio San Felipe, hasta llegar a la sucursal bancaria donde trabaja.

"Manifestó que unas personas le colocaron el cinturón bomba desde su residencia con la amenaza de detonarlo sí no entregaba el dinero de la sucursal bancaria Bancolombia", expresó el uniformado.

Agregó que los agentes antiexplosivos descartaron que el elemento fuera explosivo apenas iniciaron la vereficación. 

"Se nota al leguas que no es un elemento explosivo. El técnico lo descartó. Está simulado con baterías y plastilina", explicó Molano.

El personal que estaba en el edifico fue evacuado de inmediato cuando se presentó el incidente, como corresponde de manera protocolaria en este tipo de episodios. 

"Estamos estableciendo si hay vinculo de la funcionaria con este hurto que se comete. Se descartó que la persona estuviera drogada", indicó. 

La otra versión de la historia

Una trabajadora del centro comercial al igual que la gerente del mismo, indicó que la mujer de aproximadamente 30 años, llegó a su puesto de trabajo como diariamente y atendió a varios clientes sin ningún problema. 

"En ese momento llegaron dos sujetos e intimidaron a la mujer con una foto de sus hijos, para que abriera la puerta. Todo lo hicieron muy discretamente porque había gente esperando en la fila", relató la ciudadana. 

Contó que los hombres ingresaron a la sucursal y le amarraron el cinturón al cuerpo, y se llevaron todo el dinero que había en la cabina, advirtiendole a la muchacha que si decía algo iban a hacer estallar el artefacto.

"Ella no quiso seguir atentiendo a los demás clientes. Le decía a la gente que se alejara. Pedía que llamaran a la Policía y en ese momento llegó la supervisora, a la cual no le quiso abrir la puerta porque lo que había pasado no era un simple atraco, que le habían puesto algo", contó. 

"Cuando llegó la Policía ella les dijo que le habían puesto una bomba y todos los que estaban en el lugar salieron corriendo. Yo fui a buscar una tía y los niños que estaban en el lugar en un evento salieron con mucha dificultad", agregó. 

La ciudadana aseguró que la mujer, que tenía una hora aproximadamente de trabajar, se encontraba en shock y no quería que nadie la tocara porque decía que estaba colocando a todo el mundo en peligro.