El Supersalud Ulahy Beltrán explicando los alcances de la decisió
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Supersalud

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Supersalud devuelve dos hospitales al departamento de Córdoba

Se trata del San Jerónimo, de Montería, y Sandiego, de Cereté.

La Superintendencia Nacional de Salud devolvió hoy a la Gobernación de Córdoba la administración de los hospitales San Jerónimo, de Montería, y Sandiego, de Cereté, luego de terminar la medida de intervención forzosa que regía desde hace cuatro años, a través de la cual se mejoraron los procesos administrativos, financieros y de prestación de servicios con el fin de garantizar el derecho a la salud de los usuarios.

Los dos hospitales fueron objeto de un intenso plan de trabajo para superar las precarias condiciones en que se encontraban cuando los tomó en posesión la Superintendencia, el 4 de febrero de 2019 el San Jerónimo, y el 20 de diciembre de 2019 el Sandiego, pasando a tener ahora un servicio que promueve la garantía del derecho a la salud de sus pacientes, con calidad, eficiencia y oportunidad.

En el acto de devolución de los dos hospitales, el Superintendente Nacional de Salud, Ulahiy Beltrán López, reiteró que el compromiso del Gobierno Nacional es coadyuvar en el fortalecimiento y seguimiento de las instituciones públicas de salud y respetar la autonomía de los entes territoriales.

“La voluntad del Gobierno actual y del Superintendente no es perpetuar las intervenciones ni mantener restringido el componente de soberanía territorial que deben ejercer los gobernantes sobre sus hospitales; y después de ciertos y significativos avances que nosotros pedíamos, se ha dado un escenario de viabilidad”, aseguró el Superintendente, al hacer entrega protocolaria de los dos centros asistenciales en el despacho del Gobernador Orlando Benítez.

Agregó el Superintendente Beltrán López que “nos sentimos tranquilos y complacidos que hoy las condiciones permiten devolverle a usted la competencia para el manejo de estos dos hospitales”.

Explicó que a partir de hoy, en un proceso de empalme y con el acompañamiento de la Superintendencia Delegada de Prestación de Servicios, el Gobernador debe generar las acciones conducentes a hacer la recepción correspondiente de todos los frentes administrativos, financieros, jurídicos, técnico científicos y de todos aquellos que se encuentran en curso, inclusive los proyectos que están aprobados en ambos hospitales para darles continuidad y que van a permitir consolidar el mejoramiento de la capacidad instalada, la optimización de la calidad de los servicios y ser una opción favorable de atención que se ofrece a los habitantes de este territorio.

Como se recuerda, para hacer posible la devolución de las dos instituciones prestadoras, la Gobernación firmó el pasado mes de agosto un acuerdo de reestructuración de pasivos sobre ambos hospitales por los dineros adeudados antes de la intervención, en el que se contempla un pago a 10 años.

En el caso del hospital San Jerónimo el pasivo es de $79.240 millones y en el de Sandiego, de $41.145 millones.

Notificación del levantamiento de las medidas.

Mejorías en hospital San Jerónimo

La gestión emprendida en el hospital San Jerónimo -cuya actual interventora es Sandra Milena Jaramillo- buscó evitar el riesgo en el que estaban los pacientes por la propia infraestructura, mejorar la dotación y solucionar la falta de medicamentos y dispositivos médicos e insumos, así como el cierre de servicios.

Actualmente este hospital tiene un proceso para asegurar la entrega efectiva de medicamentos de forma oportuna, al igual que los insumos y dispositivos requeridos en los procesos de atención; equipos biomédicos, servicios del banco de sangre, laboratorio clínico, medios diagnósticos con equipos en funcionamiento, tomógrafo, rayos X portátil y estático, ecógrafos y Arco en C.

Además, se abrieron los servicios de nefrología, gastroenterología, cirugía maxilofacial, rehabilitación integral, cirugía artroscópica y hemodiálisis.

También se adecuaron las áreas de urgencias, hospitalización, unidad intermedia de neonatos, salas de parto, de cirugía y consulta externa. Se construyó la Unidad de Cuidados Intensivos e intermedios, el área de rehabilitación integral, los quirófanos y el área de esterilización.

El Ministerio de Salud y Protección Social aportó $3.200 millones para dos proyectos de reconversión tecnológica.

En temas financieros, se alcanzó una facturación de $5.143 millones, con lo que puede cubrir su operación corriente la cual asciende a $4.655 millones.

Desde el 18 de agosto de 2022, el Hospital inició el proceso de saneamiento y reestructuración de pasivos y en materia de cobro coactivo, se recuperaron $6.534 millones que debían diferentes entidades.

El Superintendente Ulahy Beltrán y el Gobernador Orlando Benítez, tras el levantamiento de la intervención.

La recuperación del Sandiego, de Cereté

La Supersalud encontró al hospital en precarias condiciones de infraestructura, que incluía los equipos biomédicos, incumpliendo los requisitos de habilitación, lo que ponía en riesgo la salud de sus pacientes.

En más de 3 años de intervención, que culminan ahora con la agente designada Carmen Sofía Daza, se construyó un área de cuidado crítico, con 13 camas UCI y una de cuidado intermedio que son parte de las 18 de hospitalización.

Las UCI actualmente cuentan con 20 camas y mejoras de infraestructura financiadas con $646 millones de recursos de la ESE y $1.992 millones aportados por el Ministerio de Salud.

También se cuenta con máquina de gases y electrolitos para UCI, se remodeló el área de consulta externa para la atención de urgencias respiratorias, se construyeron 4 consultorios de medicina especializada, se remodeló la primera parte de urgencias, se mejoraron las habitaciones y así mismo se realizó mantenimiento total a la sede de San Carlos.

En materia de servicios, se fortaleció el área de imágenes diagnósticas, se actualizó el tomógrafo, se adquirió un equipo de RX portátiles y un arco en C.

Con recursos del Ministerio por $3.076 millones se adquirieron camas, camillas de transporte, desfibriladores, un electrocardiógrafo, una mesa de atención de partos, monitores, lámparas cielíticas, máquinas de anestesia, instrumental quirúrgico y equipos de laboratorio.

En materia administrativa y financiera, la ESE tiene, con corte a diciembre de 2022, un promedio de recaudo de $2.742 millones de pesos, y unos compromisos presupuestales sin incluir cuentas por pagar de $2.525 millones.

 

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