El catamarán francés Mobula 8, presentado este viernes en París por la ONG The Seacleaners, limpiará a partir de 2022 residuos contaminantes de varios ríos del sudeste asiático, la región en la que esa organización francesa considera que es más urgente actuar.

 El barco recogerá tres tipos de desechos: objetos de tamaño medio, como una botella, micropartículas de residuos descompuestos y líquidos contaminantes como combustibles e hidrocarburos.

The Seacleaners fue creada hace cinco años y al empezar a construir su primer navío de limpieza marina, el Manta, se dieron cuenta de que con él "no podían acceder a los ríos y que era allí dónde hacía falta atacar la cadena de contaminación", explicó a EFE su director técnico, Frédéric Silvert.

Entonces decidieron construir el Mobula 8, de ocho metros de eslora y 3,4 de manga, en colaboración con Éfinor, un armador bretón que asegura que su barco es el primero del mundo que recoge desperdicios sólidos y líquidos contaminantes al mismo tiempo.

El catamarán los engulle y almacena en una bolsa. "La propulsión del motor del Mobula 8 crea un flujo de presión que atrae los residuos hasta unas redes que filtran los objetos sólidos y las partículas más pequeñas", ilustró Silvert.

Antes de devolver el agua al río, esta pasa por un pequeño depósito que detecta la densidad de los diferentes líquidos que hay allí y que retiene los combustibles e hidrocarburos.

El Mobula requiere de tres personas para navegar y su capacidad es de 2.400 kilos de residuos sólidos y 1.000 litros de contaminantes líquidos.

Su autonomía es de un día, tras lo que debe volver al puerto a repostar. La idea de la ONG es que atraque siempre cerca de centros de reciclaje para continuar el ciclo sostenible de lo recogido.

El Mobula funciona con carburante convencional, lo que a su vez contamina las aguas, pero el armador asegura que limpia mucho más que ensucia.

El navío, que toma su nombre de una especie de manta -el animal submarino- llamada Mobula, ha costado 180.000 euros que han pagado a medias The Seacleaners y Éfinor, que lo hizo como acción social.

En lo que queda de año, el barco hará demostraciones por toda Francia y en 2022 partirá a Indonesia para limpiar sus ríos más contaminados: "Vimos que donde hacía más falta era allí. El 20 % de la contaminación fluvial está en el sureste asiático", explicó Benjamin Lerondeau, director de operaciones de Éfinor.

Al evento inaugural, en un canal del Sena, asistieron miembros de embajadas de países de esa región, como Sri Lanka, interesado en un ejemplar para limpiar el vertido de carburante en sus aguas provocado por el reciente siniestro de un carguero singapurense.

De cara al futuro, The Seacleaners, que este año quiere abrir una oficina en Barcelona, planea donar el Mobula 8 a una entidad protectora marina asiática, centrarse en la puesta en marcha del Manta, su gran embarcación de limpieza marina, y seguir construyendo ejemplares del Mobula y situarlos en ríos de todo el mundo.

EFE