En medio de la fiesta nacional del 20 de julio, la familia del deporte colombiano celebró no solo el 'Grito de la Independencia', sino el despegue de un vuelo chárter con destino a Europa con lo más granado del deporte élite colombiano. O bueno, casi todo pues la barranquillera María Fernanda Herazo no se puso subir en él. 

Herazo se tuvo que quedar en el país, al que había llegado desde Chile, donde entrena, para cumplir con los protocolos del aislamiento preventivo obligatorio. 

La raqueta del Atlántico, la mejor del país en la actualidad, tuvo que soportar el tremendo golpe de no alcanzar a reunir los papeles a tiempo y por ellos quedarse en su casa.

Hoy, unos cuantos meses después, sigue en su casa. La diferencia es que ahora descansa luego de un mes de gira por cuatro ciudades, Pereira, Cali, Armenia y Cota, donde ganó de manera consecutiva 20 partidos y cuatro finales para barrer a gusto en los torneos de reactivación de la Federación Colombiana de Tenis. 

"Me siento un poquito agotada, pero feliz de poder haber logrado estos cuatro campeonatos. Hace mucho tiempo no competía en mi país y qué más delicioso que hacerlo con victoria. Ahora a descansar un poco y esperar que abran las fronteras para ir a Santiago (Chile), que es donde actualmente estoy entrenando", expresó la barranquillera a Zona Cero. 

'Mafe' describió como una inmensa felicidad volver a pisar las canchas y poder hacer no solo aquello que más le gusta, sino en lo que se ha preparado a conciencia para ser la mejor. 

"Al llegar, la felicidad de volver a competir, luego de pasar momentos difíciles, no haber viajado en el vuelo humanitario por cuestiones de documentos y temas que se habían dado al momento de ir a Italia. Esto nos sacó del tema de lo que es la pandemia, la salud mental de los deportistas es importante y estos torneos jugaron parte fundamental en ir aplacando las frustraciones", reseñó. 

El golpe de quedarse en Barranquilla fue duro. Pero el grupo de trabajo que la acompaña consiguió que ella siguiera madrugando, en los horarios autorizados por el Gobierno Nacional, para entrenar y sobre todo haciendo ejercicios mentales.   

"Claro, habían dos caminos: el primero, quedarme en la negatividad, diciendo '¿por qué pasa esto?' y la otra era salir adelante y seguir entrenando. A pesar de qué me preparé para jugar en Europa y ya en la parte mental estaba lista, no viajar claro que afecta emocionalmente. Fueron momentos difíciles, pero gracias a Juan José Ordóñez que es mi preparador físico y mi coach mental, me ayudó mucho a mantenerme con energía. La resilencia es algo importante", enfatizó. 

El primer partido vino mucho antes del Open de Pereira, primero de su seguidilla de triunfos, el juego estaba en su cabeza para no tirar a la basura mucho trabajo por la tristeza. 

"Ese fue el primer partido y el más importante. Haber salido de ese grado de frustración que generó no viajar a Europa y quedarme en el ranking y que las otras fueran subiendo. Ese fue el partido más difícil y lo pude sacar adelante", aseguró.  

A raíz de esta labor, Herazo tomó mucha más conciencia de la labor fundamental de un grupo de trabajo a su alrededor, algo que no es barato pero que rinde frutos al proyecto. 

Es por eso, que Mefe 'le tocó la ventana' al empresario Christian Daes, un enamorado del deporte de las raquetas, para que le impulse en este proyecto de preparación, como ya ha hecho el COO de Tecnoglass con otros atletas y eventos tenísticos. 

"La verdad que me gustaría mucho. Barranquilla está creciendo hacia el mundo, por qué no apoyar a sus deportistas. Acá hay con qué y podemos llegar a lo más alto. Mi invitación es a que los empresarios me apoyen. Ahora cuento con el apoyo del señor Fernando Ardilla de Petromil, el cual le agradezco mucho. Que bonito que le guste al señor Christian Daes este deporte, cuando quiera vamos y hacemos una partida, espero ir de la mano con él", deseó. 

Al cierre de esta nota, María Fernando Herazo estaba en conversaciones con la Fundación Tecnoglass para lograr un acuerdo. Esta tenista está convencida de su talento y en las últimas semanas lo confirmó, no solo ganando sino viendo ganar a algunas jugadoras que ella ha dominado en la cancha. 

“No sé si escucharon de Nadia Podaroska, hizo semifinales de Roland Garros y yo le gané en varias oportunidades. He tenido resultados contra chicas que están en el top-100. Lo que yo digo es: acá se necesita apoyo, impulsar y un equipo de trabajo”, justificó. 

Mafe le apunta a jugar torneos profesionales este año en Estados Unidos, Challergers y demás, si la pandemia lo permite.

Si no es así, se quedará en Barranquilla trabajando a conciencia, pues para el 2021 volará más alto que cualquier avión y más allá del horizonte en el océano.