El príncipe Enrique de Inglaterra y su prometida, la actriz estadounidense Meghan Markle, posaron hoy brevemente para los fotógrafos en los jardines del palacio de Kensington, donde reside el nieto de la reina Isabel II.

Muy sonrientes y visiblemente nerviosos, Enrique y Markle se dejaron fotografiar después de que Clarence House, residencia del príncipe Carlos, anunciase hoy que el príncipe se casará en la primavera de 2018, en una fecha y lugar aún por determinar.

Con un traje azul marino, el príncipe respondió con un "emocionado" a la pregunta de un fotógrafo sobre cómo se sentía, mientras que Markle dijo sentirse "muy feliz".

La pareja, que se conoció el año pasado, no habló con los fotógrafos y posó por unos breves momentos ante los jardines del palacio donde hay un estanque de agua rodeado de plantes y flores.

La actriz, que mostró su anillo de diamantes que le regaló el príncipe para el compromiso, vestía un abrigo blanco con cinturón sobre una falda oscura y llevaba el pelo suelto.

Enrique, de 33 años, y Markle, de 36, se conocieron en mayo de 2016 en Canadá, cuando el hijo menor del príncipe de Gales y la fallecida Diana de Gales estaba promocionando en Toronto los Juegos Invictus, en los que participan militares veteranos.

El príncipe Enrique, quinto en la línea de sucesión a la corona británica, se comprometió con la actriz estadounidense a principios de mes y se lo ha comunicado a la reina Isabel II, según un comunicado divulgado por Clarence House.

La pareja, agregó la nota, residirá en una pequeña casa adjunta al palacio de Kensington, donde vive actualmente el príncipe Enrique y también los duques de Cambridge, Guillermo y Catalina. 

EFE