Este miércoles 16 de noviembre fue instalada la subcomisión para iniciar la redacción de la reforma pensional que será radicada ante el Congreso de la República en la última semana de abril de 2023.

Comenzará con los puntos de las propuestas de campaña del entonces candidato Gustavo Petro, de entregar un subsidio de medio salario mínimo a 3 millones de adultos mayores que no gozan de pensión.

Para ello, todos los trabajadores que ganan menos de cuatro salarios mínimos pasarían a cotizar a Colpensiones, en lugar de hacerlo en el sistema privado que administran las AFP.

El Gobierno espera que el proyecto incluya también elementos como las cotizaciones a los trabajadores del campo, el incremento anual de las pensiones y los costos adicionales a las nóminas relacionados con la cotización

Con respecto a las llamadas ‘megapensiones’  el Gobierno busca evitarlas, aunque hay una sentencia del Consejo de Estado que se refiere a todo lo contrario.

Según una sentencia del alto tribunal en septiembre del año pasado, el Gobierno debe habilitar un mecanismo para que quienes ganan entre 25 y 45 salarios mínimos mensuales puedan cotizar a pensión por esos valores. Hoy solo pueden hacerlo hasta los 25 millones de pesos.

Hacerlos cotizar más suena bien hasta que se analiza la otra cara de la moneda y es que esas personas pueden exigir en el futuro pensiones más altas y eso costaría un montón de plata

El cálculo del Ministerio de Hacienda es que en total 12.420 personas podrían beneficiarse de esa sentencia en los próximos años, si piden esas pensiones más altas, el costo para el Estado es de 3.5 billones de pesos.

Con esa plata el país podría crear unos 282.000 cupos de Colombia Mayor para el año 2060.