A raíz de la ausencia del Presidente Gustavo Petro de su participación este miércoles, último día de la Cumbre de la Amazonía, a la que fue invitado por el mandatario del Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva, además de su no presencia en la toma de la foto oficial con los demás presidentes que asistieron al evento, en Colombia se armó una polémica por esta nueva y reiterada “desaparición” del Jefe de Estado colombiano.

Como respuesta a estos hechos, fuentes de la Casa de Nariño manifestaron a periodistas que el mandatario no estuvo en la foto porque todo el tiempo atendió de manera virtual la situación que ocurría en Colombia por el presunto plan para atentar contra la vida del Fiscal General, Francisco Barbosa, por parte de la guerrilla del ELN. 

Entonces la pregunta que comenzó a circular en medios políticos era que si el Congreso de la República, en el ejercicio de control político, podía o no exigirle al Gobierno Nacional entregar los detalles de la agenda cumplida por el Presidente Petro en su viaje al exterior. 

Este interrogante sirvió para que funcionarios del área administrativa de la corporación explicaran que la Presidencia no está en la obligación de entregar este tipo de información de forma detallada, y podría limitarse a decir que el mandatario Petro estaba cumpliendo actividades de agenda privada. 

También argumentaron que los viajes internacionales del Presidente de la República son autónomos, no están supeditados a un permiso previo del Congreso para poder desarrollar las actividades de Gobierno y de Estado.

La ley establece que la Casa de Nariño debe informar la salida del territorio del Presidente, pero no solicitar alguna especie de autorización.