Cuando el pasado jueves 17 de noviembre, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, María Claudia Lacouture, visitó el Teatro Santa Marta para comprobar el avance de las obras, el personal de la concesión encargada de este proyecto no sobraba. Los empleados del consorcio, vestidos con trajes grises y avisos luminosos estaban prestos a cualquier requerimiento de la ministra. 

En su visita, María Claudia Lacouture posó para la foto usando instrumentos de medición topográfica y dio un balance positivo de la obra, la cual -en teoría- se reanudaba después de algunos obstáculos que mantuvieron la obra paralizada. 

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Sin embargo, menos de una semana después de esta visita, cuando la ministra de Comercio ya se fue de Santa Marta, pareciera que los obreros también se hubiesen ido con ella. 

Seguimiento.co constató que este miércoles 23 de noviembre, a las 9:30 a.m., en plena hora laboral, el teatro a medio demoler se encontraba prácticamente vacío. A duras penas dos personas escapaban del sol bajo un árbol en una de las esquinas del lote, mientras que un solo obrero con casco caminaba en medio de las ruinas de lo que aún queda erigido en el teatro.

De acuerdo a lo informado por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, para terminar esta obra en el tiempo previsto, se definió avanzar en cuatro frentes de trabajo para desarrollar las actividades de localización y replanteo, demoliciones, desmontes (losas, pisos y vigas), excavaciones y cimentación (placas, gradas y muros), y componente ambiental (poda de árboles, incluida socialización con los vendedores de jugos, por parte de la Alcaldía).

Sin embargo, en este momento, el Teatro de Santa Marta está igual que antes: detenido.