Por José Granados Fernández
Twitter: @JoseGranadosF

La del miércoles 4 de noviembre parecía una sesión normal de la Asamblea del Atlántico. Lo más importante que estaba pendiente era la aprobación, en segundo debate, para que la Gobernación pudiera contratar los diseños de la prolongación de la carrera 51B, o Corredor Universitario, desde la Circunvalar hasta Puerto Colombia.

Doce de los 14 diputados estaban presentes. Solo dos de ellos, Marly Miranda, del Partido Conservador, y Nicolás Petro, de la Coalición Colombia Humana Atlántico, asistían a la reunión de manera virtual. En el grupo había cero estrés, todos estaban relajados, al fin y al cabo regresaban a sus labores luego del puente festivo de la Noche de Brujitas y el Día de los Difuntos.

Gersel Pérez, presidente de la Asamblea, electo por Cambio Radical, llamó a lista y les informó a sus colegas lo que sería el orden del día. Entonces comenzó lo inesperado. Una proposición de Santiago Arias, también de Cambio Radical, llenó de sorpresa el recinto ocupado solamente por diputados, a raíz de las medidas contra el Covid-19.

“Presidente -dijo Arias, tras pedir la palabra- quiero someter a consideración de la honorable Asamblea una proposición: que se incluya en el orden del día la elección de la nueva mesa directiva para el 2021”.

Lo planteado por Arias no era un simple trámite interno electoral en la Asamblea. Era, ni más ni menos, el desafío al poder que venía ejerciendo Gersel Pérez. Además, era el anuncio de que se había formado una nueva mayoría, pese al mensaje de unión pregonado por algunos diputados.

En ese momento las preguntas eran ¿cuántos y quiénes estaban en la nueva mayoría?

Pese a que estatutariamente la elección debe hacerse en noviembre, a la propuesta de Arias le surgieron opositores. Lourdes López, del Partido Liberal; Karina Llanos, de La U, y Miguel Ramos, del Centro Democrático, dijeron que no, que la dejaran para otra sesión.

Pero la decisión debía tomarla la plenaria. Y así fue. 9 diputados decidieron que se incluyera la elección. Además del proponente, a favor votaron cuatro más de Cambio Radical, Gonzalo Baute, Estefano González, Welfran Mendoza y Sergio Barraza; los dos conservadores, Merly Miranda y Federico Ucrós; el liberal David Asthon y Petro, quien, en cumplimiento del Estatuto de la Oposición, tenía asegurado un puesto en la mesa directiva.

Quedaba claro que la nueva mayoría estaba conformada por 8 diputados. “Petro no se incluye como el noveno porque él, por razones estatutarias, tiene sus propios derechos”, explicó uno de los dirigentes consultados por Emisora Atlántico y Zona Cero.com.

Es decir, del otro lado quedaban una minoría de 5: el presidente Pérez, López, Llanos, Ramos y Freddy Pulgar, de La U, quienes votaron por el no a la escogencia de mesa directiva en ese momento.

Tras lo ordenado por la mayoría, comenzaron las postulaciones. Santiago Arias propuso para presidente a Baute, en cumplimiento del acuerdo político que le daba a Cambio Radical el derecho de ocupar dos años la presidencia por haber elegido 6 diputados.

Por unanimidad, Gonzalo Baute fue escogido para esa dignidad.

El grupo de Gersel Pérez postuló para la Primera Vicepresidencia a Miguel Ramos, pero estratégicamente Barraza se opuso y dijo que ese cargo debía ser ocupado el año entrante por Nicolás Petro, pues a este, miembro de la actual mesa directiva, le estaba prohibido repetir en 2021 como Segundo Vicepresidente.

El argumento de Barraza funcionó y Petro fue elegido Primer Vicepresidente también con 14 votos.

La nueva mayoría siguió moviendo sus fichas en el ajedrez que jugaban y postularon a Federico Ucrós para la Segunda Vicepresidencia, ante la insistencia de los aliados de Pérez de meter en la nueva mesa directiva a Ramos, pero Ucrós logró 9 votos y lo derrotó.

“En su afán por manejar la Asamblea 4 años, Gersel (Pérez) había montado una estructura con su grupo de amigos para dominar la mesa directiva. Con la elección cantada de Baute y su aspiración a que eligiéramos a Ramos como vicepresidente, pretendía que éstos se retiraran de la Comisión de Presupuesto para él asumir la presidencia. En eso también lo derrotamos, porque el acuerdo es que Arias ocupará este cargo”, informó una de las fuentes consultadas.

“Fue un jaque mate”, reafirmó otro diputado que habló con Emisora Atlántico y Zona Cero.com. “Sin el control de la mesa directiva ni de la Comisión del Presupuesto, perdió su hegemonía en la Asamblea”, enfatizó.

“En política hay que sumar y no dividir, ni aprovecharse de la cercanía con los jefes del partido, como él ha hecho con el senador Arturo Char, para conseguir beneficios propios, con burocracia y contratos, en detrimento de otros, mostrándose como el diputado imprescindible, el que todo lo controlaba”, cuestionó un tercer dirigente.

De insaciable apetito con las Órdenes de Prestación de Servicios, que exige por cientos en la administración departamental a pesar de las que ya tiene, Gersel Pérez vendía la idea en los medios de comunicación que había armonía entre todos los diputados, pero los hechos demuestran que no era cierto y que “nadie está dispuesto a dejarse imponer nada” en la Duma. También, quedó demostrado que existe un distanciamiento político entre él y los integrantes de la bancada de Cambio Radical, porque no de otra forma se entiende que los 5 restantes diputados lo hayan dejado por fuera de la nueva mayoría.