El ministro de Defensa, Iván Velásquez, declaró que hasta el momento no se ha establecido una mesa de conversación con la disidencia de las FARC ni con el Clan del Golfo, para incluirlo en el marco de la ‘paz total’ que proyecta el gobierno del presidente Gustavo Petro.

“Por ahora solo está en marcha el mecanismo de verificación al cese al fuego bilateral con el Estado Mayor Central de las extintas FARC, pactado en los protocolos que fueron difundidos hace una semana”, no hay aún una mesa establecida”, dijo el funcionario.

Explicó que la Oficina del Alto Comisionado para la Paz es la interlocutora en estos procesos.

“La única mesa de diálogos que está activa en este momento es la del Ejército de Liberación Nacional (ELN)”, precisó Velásquez.

Esta guerrilla inició esta semana con el Gobierno Nacional el segundo ciclo de conversaciones en la Ciudad de México. 

De otro lado el jefe de cartera aclaró que, pese al cese al fuego, se continuarán con las operaciones militares y policiales contra el narcotráfico y para proteger a las comunidades. Velásquez agregó que si en un espacio donde haya tenido injerencia un grupo armado ilegal se encuentra un laboratorio de droga, se debe destruir.

“Sin que nadie pueda afirmar que hay una violación del cese por parte de la Fuerza Pública, porque es inadmisible que siquiera pudiera entenderse que el cese al fuego signifique una permisión para que continúen realizando sus actividades delictivas”, señaló.

Velásquez entregó estas declaraciones en Tarazá, Antioquia, donde reiteró su llamado a abrir de nuevo la sede de la Fiscalía, que permanece cerrada después del secuestro y posterior liberación de tres funcionarios judiciales. 

También anunció la reactivación contra la gran extracción ilícita de yacimientos mineros en esa zona por parte de la Fuerza Pública.