El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao.
El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao.
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Agencia IP

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Vicepresidente de Brasil compara criminales de su país con guerrilla colombiana

"Desafortunadamente, tenemos que reconocer que en ciertos lugares de Brasil hay una guerra", dijo.

El vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao, señaló este lunes que las fuerzas policiales están librando una guerra contra las bandas narcotraficantes que operan en el gigante sudamericano, a las que comparó con la guerrilla colombiana.

El comentario de Mourao, quien asumió hoy como presidente interino de Brasil tras el viaje de Jair Bolsonaro a Nueva York para participar en la 74ª Asamblea de la ONU, se dio luego de que una niña de ocho años muriera víctima de un disparo de fusil en la espalda durante una operación policial en una favela de Río de Janeiro.

"Desafortunadamente, los narcocuadrillas que operan en Brasil se convirtieron en guerrilleros. Si se compara con Colombia, es lo mismo", aseguró Mourao en declaraciones a la prensa en Brasilia.

"Entonces, desafortunadamente, tenemos que reconocer que en ciertos lugares de Brasil hay una guerra, y luego ocurren tragedias de esta naturaleza", dijo en referencia a la muerte de la menor que ha causado conmoción en Brasil.

Agatha Felix murió el pasado viernes tras recibir un tiro por la espalda cuando se desplazaba con un familiar en una camioneta en una de las comunidades del complejo do Alemao, un conjunto de favelas al norte de Río de Janeiro azotado por la violencia debido a la presencia de grupos narcotraficantes que dominan la zona.

Aunque la Policía asegura que se trata de una víctima de una bala perdida en medio de un tiroteo entre las autoridades y delincuentes, algunos residentes señalan lo contrario y culpan a las autoridades de la muerte de la pequeña.

El conductor de la furgoneta en la que viajaba Agatha, desmintió el domingo la versión de la policía y señaló que, cuando la pequeña fue herida por la bala, no había ninguna balacera en la región.

La "policía dijo que había un tiroteo por todos lados, pero es mentira. Mentira", señaló el conductor, quien, como otros testigos, asegura que los tiros partieron de un agente.

El presidente en funciones, que es un general retirado del Ejército, culpó a las bandas de narcotraficantes de poner en riesgo a la población.

"El estado debe llevar a cabo sus operaciones y buscar de todas las formas posibles la seguridad de la población. El narcotráfico pone a la población en la calle y dispara a las tropas, por lo que pone en riesgo a las mismas personas que habitan esa región. Esto es una tragedia, y tenemos que hacer todo lo posible e imposible para evitar que eso suceda", dijo.

La muerte de la menor se suma a la de al menos cinco personas en un operativo llevado a cabo la semana pasada en ese mismo complejo, en el que se registraron fuertes enfrentamientos entre la Policía y delincuentes de la zona y que obligó a que por lo menos 14 escuelas públicas cerraran sus puertas para proteger a los estudiantes.

Durante el operativo, las autoridades policiales se apoyaron con un helicóptero blindado desde el que también se realizaron disparos, según testimonios de algunos moradores.

El Gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, ha sido denunciado ante organismos internacionales por las organizaciones de defensa de los derechos humanos debido a que es un defensor del uso de francotiradores y de helicópteros blindados en este tipo de operaciones pese a poner en riesgo a cientos de personas inocentes.

Witzel también defiende una solución policial para los problemas de violencia en las favelas de Río de Janeiro y que los uniformados no sean sancionados por las muertes que provocan.

En una rueda de prensa este lunes, Witzel lamentó la muerte de la pequeña y defendió nuevamente la política de seguridad pública en Río de Janeiro, la cual, dijo, "busca reducir los índices de criminalidad".

Según datos del Instituto de Seguridad Pública de Río de Janeiro, entre enero y julio de este año, es decir desde que Witzel asumió su mandato, 1.075 personas murieron en operaciones policiales en esta ciudad brasileña, un número en un 20 % superior al del mismo período del año pasado.

EFE

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