La canciller alemana, Ángela Merkel, defendió hoy la decisión de atender en el país al líder opositor ruso Alexéi Navalni, quien ingresó en coma en una clínica berlinesa, y aseguró que Berlín buscará una "reacción a escala europea", una vez se esclarezca su presunto envenenamiento.

"Tenemos la obligación de hacer cuanto sea necesario para aclarar el caso. Cuando tengamos más información sobre lo ocurrido trataremos de tener una reacción a escala europea y no de un solo país", afirmó, en una comparecencia ante los medios.

La líder alemana agradeció a este respecto "los esfuerzos que están realizando" por la salud de Navalni los médicos de la clínica universitaria de la Charité, donde ingresó el pasado sábado en coma por sospechas de envenenamiento.

Según informaciones del semanario "Der Spiegel", los expertos que tratan al líder opositor ruso han pedido colaboración al ejército alemán ante la sospecha de que haya podido ser envenenado con un agente químico.

La clínica ha solicitado discretamente ayuda al ejército, que tiene en la capital bávara, Múnich, un laboratorio de farmacología y toxicología estrictamente aislado en el que trabajan los mejores expertos en sustancias tóxicas y agentes químicos de toda Alemania.

Este semanario afirma, asimismo, que la propia Merkel se mostró abierta al traslado de Navalni a Alemania, que ha exigido a las autoridades rusas un total esclarecimiento del caso, que está muy preocupada por la situación líder opositor suyo y se informa cada día con detalle sobre su estado de salud.

Navalni fue trasladado a Berlín por iniciativa de la ONG Cinema for Peace desde un hospital en la ciudad siberiana de Omsk, donde había sido ingresado tras sufrir un colapso durante un vuelo.

EFE