Máximo cabecilla del Estado Islámico, Adnan Abu Walid al Sahraoi.
Máximo cabecilla del Estado Islámico, Adnan Abu Walid al Sahraoi.
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Líder de Estado Islámico fue dado de baja en el Sahara por fuerzas francesas

Se desplazaba de parrillero en una motocicleta.

El máximo cabecilla del grupo terrorista Estado Islámico (EI o Isis), Adnan Abu Walid al Sahraoi, que tenia epicentro de acciones en la zona africana del Sahel, en inmediaciones del desierto de Sahara; fue dado de baja por unidades del Ejército de Francia.

La confirmación del duro golpe contra el grupo yihadista la entregó el propio presidente francés, Emmanuel Macron, en su cuenta de Twitter.

"Se trata de un nuevo gran éxito en el combate contra los grupos terroristas en Sahel", señaló el mandatario.

Walid al Sahraoui, exintegrante del Frente Polisario saharauí, fundó en 2015 el grupo Estado Islámico en el Sahara, tras una disidencia del movimiento Al Qaida.

La operación en la que murió el cabecilla terrorista, considerado responsable de la mayoría de ataques en Malí, Níger y Burkina Faso, se llevó a cabo  luego de una "maniobra de inteligencia de largo aliento, y gracias a varios operativos de captura de cercanos a al Sahraoui", informó por su parte la ministra de Defensa de Francia, Florence Parly, en una conferencia de prensa.

Walid al Sahraoui era "el que estábamos buscando, ya que era el líder autoritario, indiscutible y sin rival" dentro del grupo yihadista, dijo también la ministra. 

Al momento del golpe Walid al Sahraoui se desplazaba como pasajero en una motocicleta objetivo de un dron teledirigido, en una zona al sur de Indelimane, en Malí, en las tres fronteras con Burkina Faso y Níger, explicaron los franceses.

El terrorista abatido fue el cerebro del asesinato de un grupo trabajadores humanitarios franceses en 2020.

Igualmente estaba siendo perseguido por Estados Unidos por una emboscada en octubre de 2017 en el suroeste de Níger, cerca de Malí, en la que fallecieron cuatro soldados de las fuerzas especiales estadounidenses y cuatro nigerianos.

Estados Unidos ofrecía una recompensa de 5 millones de dólares por información sobre el paradero de Sahraoui.

A pesar del resultado exitoso en Sahel, el presidente Macron mantuvo la decisión de reducir la presencia militar francesa en la zona, en la cual llevan ocho años operando contra el terrorismo islamita.

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