Donald Trump no hizo planes para el retiro de tropas en Afganistán
Tampoco planificó la salida de ciudadanos estadounidenses y de países aliados.
El Gobierno de Joe Biden hizo público este jueves un informe en el que culpa a la Administración de Donald Trump (2017-2021) de no haber elaborado ningún plan para facilitar la retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán tras 20 años de guerra.
Según un resumen del documento, difundido por la Casa Blanca, la Administración de Trump no proporcionó a Biden ningún plan sobre cómo llevar a cabo la retirada de las tropas o sobre cómo evacuar a los ciudadanos estadounidenses en el país, así como a sus aliados afganos.
"Las opciones a disposición del presidente Biden sobre cómo ejecutar la retirada de Afganistán estaban severamente limitadas por las condiciones creadas por su antecesor", se explica.
En una rueda de prensa, John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, se centró en esa falta de preparación de Trump y aseguró que las decisiones que tomó el expresidente "limitaron" las opciones disponibles para el mandatario demócrata.
Entre otras cosas, Kirby citó la decisión de Trump de reducir la presencia de tropas estadounidenses en Afganistán a 2.500, el punto más bajo desde el inicio de la guerra en 2001, y aseguró que no destinó suficientes recursos a un sistema para la concesión de visados a los aliados afganos de EE.UU.
Sin planes para la retirada
Según el portavoz, el equipo de Biden aprovechó los meses previos a su llegada a la Casa Blanca en enero de 2021 y tras haber ganado las elecciones de noviembre de 2020 para pedir "repetidamente" a los asesores de Trump los planes elaborados para evacuar Afganistán, pero se toparon con que no había nada.
En el resumen del informe, de 12 páginas, se echa constantemente la culpa al Ejecutivo anterior del caos de esa retirada en agosto de 2021 y no se hace ninguna autocrítica por las decisiones tomadas por el Gobierno de Biden.
Kirby declinó decir si Biden se siente personalmente responsable de lo ocurrido en Afganistán y se limitó a decir que, como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, asume "absolutamente" responsabilidad por cualquier operación militar.
El portavoz defendió, sin embargo, que la decisión de salir fue la "correcta" y sostuvo que Biden está "orgulloso" de la forma en la que las Fuerzas Armadas lograron sacar del país a 124.000 personas, entre estadounidenses y afganos.
"Nadie está diciendo que todo fuera perfecto, pero hay mucho que sí salió bien. Y muchos afganos están viviendo ahora mejor en este país gracias a los sacrificios que hicieron muchos miembros del Gobierno estadounidense. Así que sí, hay mucho orgullo en eso", subrayó.
La lección: empezar las retiradas antes
Una de las lecciones que se extrae de la experiencia de Afganistán, explicó Kirby, fue que la preparación de las evacuaciones en un ambiente de conflicto debe empezar antes para ser efectiva, lo que ha provocado cambios a nivel interno dentro del Gobierno.
Este jueves, la Casa Blanca envió al Congreso la versión completa del informe con información clasificada y donde se analizan los preparativos que hizo EE.UU. para la retirada, que estuvo marcada por el atentado en el aeropuerto de Kabul, reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) y donde murieron unos 170 civiles afganos y 13 soldados estadounidenses.
La caótica retirada conllevó una bajada en los niveles de aprobación de Biden, que no pudo sacar de Afganistán a todos los afganos que habían luchado del lado de Washington y tuvo que ver cómo los talibanes se apropiaban de material militar estadounidense valorado en miles de millones de dólares.
La oposición republicana en el Congreso ha criticado la forma en la que la Administración de Biden ejecutó la salida y llevaba meses pidiendo que se les entregue el informe, algo que finalmente ocurrió este jueves.
El objetivo del documento es extraer lecciones de lo ocurrido en Afganistán para el futuro, por ejemplo en la guerra en Ucrania. Fue elaborado en los últimos meses por diferentes agencias del Gobierno, incluidos los departamentos de Defensa y de Estado.
La Administración de Trump y los talibanes llegaron a un acuerdo en febrero de 2020 en el que se establecía que las tropas estadounidenses debían dejar el país antes del 1 de mayo de 2021 y, a cambio, los talibanes se comprometían a no atacar a las tropas de EE.UU. y a no albergar a grupos terroristas.
Tras llegar a la Casa Blanca, Biden dijo que no era posible retirar las tropas en mayo y acabó fijando como fecha límite finales de agosto.
Ese pacto fue negociado sin la participación del entonces presidente afgano, Ashraf Ghani, quien huyó de Kabul en avión horas antes de que los talibanes se hicieran con la capital.
El Gobierno de Biden se ha mostrado muy crítico con ese acuerdo de Trump y considera que sirvió para empoderar a los talibanes y debilitar al Gobierno de Ghani, al mismo tiempo que dejó sin opciones a Estados Unidos.
EFE