Al menos 70 muertos, entre ellos varias mujeres y niños, y más de 200 heridos dejó un ataque con explosivos contra una caravana de refugiados que pretendían salir de Gaza dentro del plazo que fijó Israel para abandonar el territorio.

Los primeros informes atribuyen este nuevo ataque cruel contra la población a milicianos de Hamás, de acuerdo con el análisis de las autoridades sobre los videos que circulan en redes sociales, pero hasta este domingo ninguno de los bandos en conflicto se había atribuido el cruel atentado que le costó la vida a decenas de personas, entre ellas mujeres y niños.

El hecho ocurrió en la ruta de evacuación a la altura del puente Salah Al-Din Gaza-Wadi.

Medios extranjeros citaron que Palestina culpa a Israel del bombardeo, pero un portavoz de las fuerzas israelíes asegura que no han sido ellos: “La explosión vino desde abajo”, lo que sugiere “algún tipo de dispositivo explosivo”, pero otras fuentes lo atribuyen a Hamás para bloquear las rutas de salida.

 

 

 

 

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Mientras tanto, Bangladesh condenó este domingo el "desproporcionado uso de la fuerza" por parte de Israel en la Franja de Gaza, entre los bombardeos que se suceden tras el ataque del grupo islamista Hamás contra el Estado judío.

Bangladesh "condenó con fuerza las crecientes bajas civiles y el desproporcionado uso de la fuerza en Gaza, y llamó a la comunidad internacional a permitir la entrada de ayuda humanitaria" a la Franja, según un comunicado del Ministerio de Exteriores bangladesí.

La nota fue publicada tras un encuentro entre el canciller de Bangladesh, A.K. Abdul Momen, y el embajador palestino en Dacca, Yousef S.Y. Ramadan.

Bangladesh reiteró su apoyo a la creación de dos estados, con una Palestina independiente, en base a las resoluciones del consejo de seguridad de la ONU.

Varios grupos islamistas como Hefazat-e-Islam han llevado a cabo manifestaciones en los dos últimos días en Bangladesh, un país donde el 90 % de sus 170 millones de habitantes son musulmanes, para mostrar su apoyo al pueblo palestino.

Con apoyo de EFE