Las autoridades tienen en su poder grabaciones de audio que le hicieron llegar extorsionistas al dueño de una carnicería en el suroriente de Barranquilla exigiendo la suma de $ 7 millones para dejarlo laborar en su negocio.

Estas grabaciones hacen parte del material probatorio incautado por el Gaula y que sirve en el proceso contra Alfredo Luis Martínez Caballero; Iván Donisio Pérez Barón, alias ‘Godzilla’; Jhonatan José Mendoza Toscano, alias ‘El calvo’; Jhon Freddy Ortiz Gonzalez, alias ‘El viejo’, quienes fueron capturados en flagrancia en el barrio Las Nieves cuando se transportaban en un taxi y una motocicleta presuntamente, a cobrar extorsiones en varios negocios de Barranquilla.

En la grabación se logra escuchar a uno de los presuntos extorsionistas exigiendo el dinero. 

“Usted sabe que el viejo ‘Negro Ober’ le manda a pedir un aporte de guerra. Todo aquel que haga caso omiso usted sabe que plan ‘pistola’”, dice el extorsionista.

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Además, justifica la cuota extorsiva disfrazando este delito con una supuesta protección del negocio de la delincuencia común. 

“Necesitamos la colaboración de ustedes. Estamos sacando la delincuencia común, que anda molestando por allí, los atracos. Usted va contar con la seguridad de nosotros. Esto es una cuota única, usted no va a pagar ni diario, ni mensual, ni semanal ni nada. Los negocios así como el de usted el aporte es de 7 millones de pesos. Usted verá si cierra o se lo cerramos”, detalla el extorsionista. 

El comerciante se muestra en desacuerdo con esa cantidad porque su negocio no da esas ganancias. 

“Eso le manda a pedir el viejo. Usted diga que no tiene eso, pero puede decir que va a colaborar con tanto. Yo le digo al viejo y él me dirá sí o no”, indica el extorsionista.

En medio de la conversación, el extorsionista da a conocer que el día anterior a la carnicería llegaron dos hombres en moto para entregar un panfleto donde debía comunicarse con ese número de celular para negociar la cuota extorsiva.

El extorsionista le pidió al comerciante cinco minutos para hablar con su jefe ante la propuesta del comerciante, por temor a represalias, que solo tenía disponible 2 millones 500 mil pesos.

Al rato, el extorsionista vuelve a llamar al comerciante a decirle que su supuesto jefe aceptó  los 2 millones 500 mil, pero debía consignarlos enseguida a un número de cuenta que le mandó por WhatsApp.