"Tome mija su celular y váyase para su casa", le dijo con tranquilidad un hombre a una jovencita, a quien segundos antes delincuentes le hurtaron un iPhone en un negocio de comidas rápidas en Barranquilla. La joven estaba en shock porque nunca había visto la muerte de cerca. 

Este ciudadano, según versiones conocidas,  estaba sentado en una mesa distante cuando se percató de que un ladrón con camisa roja, intimidaba a una joven pareja para quitarles sus pertenencias.

En cuestión de segundos, desenfundó su arma y le propinó tres disparos en la cabeza a Leandro Salas, quien cayó inmediatamente muerto. El otro presunto atracador, David Enrique Zambrano Ferrer, de camiseta marrón, estaba esperando a su cómplice en la esquina y se dio cuenta del hecho quiso disparar, pero otro ciudadano que estaba en la mesa acompañando al que disparó primero entró en acción y lo impactó en varias ocasiones.

Ahí todo fue confusión, la gente salió corriendo, la pareja quedó en shock por el hecho, porque no solo fue el momento de tensión vivido sino que los disparos todavía resonaban en sus cabezas. 

Uno de los que disparó le dijo a uno de los atracadores que agonizaba: "Ahora sí te vas a morir".

La versión que circula es que "cuando estaban en el suelo,  los revisaron y sacaron los relojes y anillos y los dejaron ahí diciendo esto no es mío que se lo lleve la policía. Nosotros nos llevamos las pistolas y ustedes no han visto nada".

"Fue horroroso, nunca habíamos visto la muerte tan cercana", relató un testigo.