Infame y aberrante es el caso ocurrido en la noche del lunes cuando la Policía fue avisada de un caso de violencia intrafamiliar en un hospedaje de la carrera 35 con calle 41, barrio Chiquinquirá, en el suroriente de Barranquilla.

Al lugar llegaron los uniformados y encontraron una escena difícil de creer: había un niño solo en una habitación amarrado de pies y manos y sin alimentación.

El niño fue rescatado por la Policía y puesto a disposición de un defensor de familia, que asumirá el restablecimiento de los derechos del menor. 

La Policía de Infancia y Adolescencia, por su parte, abrió una investigación contra los padres del niño por el evidente caso de violencia intrafamiliar.