Adolfo Molinares vive ahora una doble tragedia.

Ayer le mataron a su hermano Jorge Armando Molinares Malvido, de 38 años, cuando laboraba en una estación de gasolina de la calle Murillo con carrera 24, barrio Montes de Barranquilla; y el pasado 24 de junio le mataron al hermano mayor Tomás Segundo Molinares Malvido, de 50 años, quien trabajaba como islero en la estación de gasolina E.D.S. la 18, en el barrio Pumarejo, en Soledad.

Aunque este último caso las autoridades asociaron el crimen a un caso por el no pago de extorsión por parte de la empresa dedicada a la venta de gasolina, aún no hay certeza sobre si los móviles del crimen de Jorge guarden relación por extorsión o intento de hurto.

Sobre Jorge, Adolfo lo recordó como una persona trabajadora.

"Mi hermano era una persona trabajadora, que salió a ganarse el pan de cada día y tristemente a las 12 a.m. nos llamaron a decirnos que le habían pegado unos disparos", aseguró.

Precisó que son las autoridades las encargadas de determinar los móviles de este nuevo crimen que enluta a su familia.

"No tengo conocimiento, ya eso es algo que hace parte de una investigación que tiene que hacer las autoridades competentes", indicó.

Adolfo señaló que "mi hermano tenía 3 meses de estar laborando en ese lugar, estaba soltero y vivía con mi mamá. Él era el sustento de ella".

Indicó que su hermano no merecía morir de esta manera y nunca le conoció problemas.

Jorge era el último de cinco hermanos, mientras que el otro hermano asesinado, Tomás, era el mayor.

Jorge fue atacado a tiros por desconocidos que huyeron en un vehículo.

La víctima fue llevada al Hospital General de Barranquilla y remitida al Camino Adelita de Char, donde se confirmó su deceso.