Las 'ollas' de vicio es un negocio rentables para las bandas delincuenciales.
Las 'ollas' de vicio es un negocio rentables para las bandas delincuenciales.
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‘Los Cabezones’, una subestructura que maneja las ollas de ‘vicio’ en Las Flores

Según las indagaciones de la Policía, gran parte estaría al servicio de ‘Los Costeños’.

En el barrio Las Flores se levantan ciudadanos de bien para salir adelante. Pescadores y comerciantes cada día salen a sus actividades diarias para buscar el sustento de sus familias en esta zona estratégica, pero a la vez humilde. 

Este sector es predilecto para el turismo por su cercanía al río Magdalena y al Mar Caribe. Sin embargo, las organizaciones delincuenciales también lo ven como una zona para incrustar sus tentáculos para sus hechos delictivos como el tráfico de estupefacientes y la extorsión.

La Policía tiene identificada una banda en el sector conocida como 'Los Cabezones'. Esta organización delincuencial tiene su origen, según investigadores, alrededor del año 2013 y 2014.

La Policía ha propinado múltiples golpes a esta organización como el asestado en agosto del 2021, cuando las autoridades informaron sobre la captura de alias ‘Cachaco Jorge’, quien sería el encargado de suministrar la logística de armamento y estupefacientes, y a su vez financia a la banda ‘Los Cabezones’.

Las investigaciones de la Policía señalan que ‘Los Cabezones’ sería una de las subestructuras que estaría trabajando para la organización de ‘Los Costeños’ con el tema de las extorsiones y el tráfico de estupefacientes.

Para los investigadores realizar este tipo de hechos delincuenciales en la ciudad requiere de una logística y ‘Los Costeños’ de una forma o otra ha ‘succionado’ a estas pequeñas estructuras delincuenciales en los diferentes barrios para ejercer un mayor control de su accionar delincuencial. Claro está, aquella banda que no se someta a esta directriz les ‘llueven’ balas. Es una forma de decir: “Te unes a mí o si no eres mi enemigo”.

Gran parte de ‘Los Cabezones’, según las indagaciones, decidió estar al servicio de ‘Los Costeños’ y así tener un porcentaje de las ganancias de las acciones delincuenciales que se recogen del microtráfico de droga y de las extorsiones. 

Pero las disputas existen

Pero también ha habido disputa de esta organización contra otras e incluso internamente entre miembros de la banda delincuencial. En agosto del 2018 circuló un panfleto en donde amenazaron a todos los integrantes de ‘Los Cabezones’ y al que vieran llegando a una tienda, negocio o carro repartidor de pan pidiendo ‘vacuna’ sería ejecutado. 

Panfleto que circuló en 2018 contra miembros de 'Los Cabezones'.

Las autoridades han logrado establecer que existe dentro de la misma organización dos bandos disputándose las ‘ollas’ de vicio y de allí donde radica las retaliaciones y los asesinatos. 

Para los investigadores de la Policía es claro que ‘Los Cabezones’ están divididos en dos bandos. Uno que está al servicio de ‘Los Costeños’ y otro con el ‘Clan del Golfo’. De allí la disputa interna para controlar las ‘ollas' de vicio a sangre y fuego. 

El 27 de septiembre del año pasado fue asesinado en una zona enmontada del barrio Miramar Daniel Samir Murillo Muñoz, alias ‘Cabezón’.

Las autoridades lo identificaron con un nombre diferente porque le encontraron una cédula falsa, pero tras la verificación confirmaron que se trataba de alias ‘Cabezón’, presunto integrante de la banda 'Los Cabezones'.

Precisamente el 11 de marzo del mismo año en Las Flores había resultado herido a bala en un ataque sicarial. En medio del ataque dos personas más resultaron heridas.

‘Cabezón’, según la Policía, tenía anotaciones judiciales por concierto para delinquir, extorsión y había sido capturado en reiteradas ocasiones. 

Las autoridades no descartan que ese crimen guarde relación con esas retalaciones por la disputa que hay para apoderarse de los negocios de mal proceder en el barrio. 

Daniel Murillo, alias 'Cabezón', asesinado en septiembre del año pasado en Miramar.

Un doble crimen: uno de las víctimas con un pasado con ‘Los Cabezones’

El 31 de enero pasado los vecinos del barrio Las Flores quedaron conmocionados por un doble crimen ocurrido en una calle del sector. 

Johan Alexander Fisher Tovar y Andrés Felipe Carrillo Escorcia, ambos de 24 años, amigos de infancia, fueron asesinados por un hombre que se les acercó y les disparó. 

Andrés no tenía anotaciones judiciales, pero Johan Alexander sí, según informó en su momento la Policía, que lo señaló de haber hecho parte de la banda ‘Los Cabezones’.

La familia de Johan no negó el pasado de su ser querido y aseguró que hace un par de meses se había retirado de ese mal camino para darle un mejor ejemplo a su pequeño hijo, quien apenas tiene 4 meses de nacido.

Sin embargo, el pasado de Johan no lo perdonó y alguien ordenó su muerte. 

La Sijin investiga si miembros de la misma banda ordenaron su asesinato por su decisión de abandonar las filas de la organización delincuencial o si tiene otro transfondo.

Lo cierto es que este asesinato volvió a colocar en los títulares de los medios de comunicación a 'Los Cabezones' por el pasado que tenía Johan con ellos. 

 

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