Álvaro Luis Ospina Illera, quien ha sido señalado como supuesto responsable de acabar con los miembros de la familia Vega Daza en junio del 2023 en Puerto Colombia y en Valencia, España, en 2024, envió un derecho de petición a la Fiscalía, Procuraduría y Presidencia  para aclarar que no tiene nada que ver con los hechos de sangre que lo señalan y en que, incluso, algunos medios de comunicación han indicado que esta masacre se desató supuestamente por el asesinato del hijo de crianza de Álvaro, en una cabaña de Puerto Colombia en una fiesta de cumpleaños en octubre del 2022.

“Tuve un hijo de crianza de nombre Jonathan José Ospino Illera, a quien le arrebataron la vida el día 24 de octubre de 2022, mientras celebraba su cumpleaños número 21, en una cabaña de Puerto Colombia Atlántico, rentada por todos sus familiares para la mencionada celebración. No obstante, tanto los medios masivos de comunicación como algunas autoridades, de una manera irresponsable y por demás injusta, han identificado ese hermoso evento, tan especial y familiar para nosotros, como una narco fiesta, que montaje tan absurdo, cuando no se encontró ni siquiera un miligramo de alguna droga ilegal, como tampoco ningún narcotraficante asistió a dicho evento”, señaló Álvaro. 

Explicó en el derecho de petición que a raíz de este suceso se han tejido versiones que señalan que en venganza supuestamente decidió acabar con la vida del clan Vega Daza, teniendo en cuenta que algunos miembros de esta familia fue a esa fiesta y habría iniciado la riña que terminó en balacera, la cual acabó con la vida del cumplimentado y un escolta de los Vega Daza. 

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“A raíz del arrebatamiento de la vida de mi hijo se ha venido especulando una serie de murmuraciones que ya hoy son vox populi, cuyo fin principal es elaborar un montaje donde se coloque o incluya mi nombre en un organigrama delincuencial, como miembro o jefe, lo cual es totalmente falso  y con ello crear pánico, zozobra, temor, miedo, en las personas y en la sociedad en general contra mi persona, cuando es todo lo contrario porque fui educado con principios éticos y morales por mis padres, soy un hombre lleno de amor, ternura y cariño, yo no soy un criminal, no soy una persona que siembra terror ni nada de eso, yo siembro es amor, por eso acudo ante ustedes”, señaló el hombre en el documento. 

Así mismo precisó que “desde la muerte de mi hijo de crianza, quise acudir a la Fiscalía General de la Nación a colocar una denuncia, pero no lo hice, porque preferí que las autoridades actuaran y solo hasta ahora, más de un (1) año después de ese fatídico día, es que vengo ante ustedes por la nube de especulaciones que se ha generado, ya no puedo más con esta situación, los medios de comunicación dicen cosas que no son, porque es claro que las víctimas somos nosotros, y nos quieren hacer ver como victimarios cuando ello no es así, cuando fuimos nosotros quienes perdimos a un ser querido”.

Ante esta situación, el hombre solicitó “con fundamento en la Constitución Política y los tratados internacionales sobre derechos humanos, se me brinde todas las garantías de seguridad jurídica y debido proceso, para que le pongan un freno, de una vez por todas, a esta situación, poniendo de presente que tengo hijos menores de edad”.

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