Un caso aberrante que mantiene consternados y aterrados a los miembros de la rama judicial y defensores públicos se registró en el Distrito judicial de Barranquilla.

Se trata de un caso de acceso carnal abusivo con menor de catorce años en concurso sucesivo e incesto.

El indiciado de estos delitos es Jaime Salazar Quintero, 63 años, un defensor público, defensor de la moral pública en su carácter de defensor de derechos humanos, miembro de la barra de abogados de la Defensoría Pública en el Atlántico, y conjuez del Tribunal Superior de Barranquilla, sala penal.

De acuerdo con lo conocido por los periodistas de Zona Cero.com, la mamá de la víctima, una menor de 14 años, lo denunció ante la Fiscalía tras ser informada por la niña del abuso carnal abusivo sufrido en las ocasiones en que se veía con su padre,  luego de la separación entre ambos. La niña quedó embarazada y tuvo un hijo. A Salazar Quintero, un Fiscal del Caivas lo escuchó en interrogatorio, y cuando llegó el informe del ADN, comprobando que el hijo de la menor es suyo, fue citado a audiencia de formulación de imputación, pero no compareció a la vista pública.

De inmediato, la Fiscalía de Caivas solicitó ante un juez de control de garantías la respectiva orden de captura y cuando fueron a buscarlo a su residencia, en el barrio Boston, encontraron con que había desocupado la casa y huido.

A través del examen genético, la Fiscalía de Caivas pudo establecer que el bebé dado a luz por la menor es hijo de su padre, el defensor público Jaime Salazar Quintero, y por ello le fue emitida la orden de captura el pasado miércoles. 

Jaime Salazar Quintero abandonó el cargo y está huyendo de la justicia. 

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