Una buena noticia se conoció al mediodía de este jueves, pues el niño Brian José Áñez Faneite abrió los ojos y pudo reconocer a su papá, después de permanecer en atención médica delicada tras haber sido golpeado por la camioneta conducida por Enrique Vives Caballero y en la que fallecieron seis personas.

Brian Áñez, único sobreviviente de esta tragedia, permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos de la clínica Cehoca, aunque su pronóstico es bastante favorable.

Leonardo Melo, de la fundación Demos, Transformando Vidas, quien ha estado al frente de la situación de salud del menor desde un principio -y quien gestionó un cambio de clínica para que recibiera mejor atención médica- celebró la buena noticia.

"Gracias a Dios Brian abrió los ojos, reconoció a su papá. Él está un poco triste por todo lo que está pasando, pero gracias a Dios está más calmado", manifestó Melo.

El pequeño Brian se encuentra conmocionado también por la pérdida de su tía, Rafael Petit, quien se había dedicado a su crianza y quien estaba a su lado al momento del accidente.

El abogado del menor, Ricardo Robles, había pedido a la jueza que un custodio de la Policía le hiciera compañía en todo momento, pues el menor es el único testigo presencial que vivió el accidente y que puede contar la versión de las víctimas.