El gremio de transportadores de taxis y autobuses entre Ureña, San Antonio y Rubio, municipios venezolanos que conectan al estado Táchira de ese país, con Norte de Santander en Colombia; han solicitado este domingo 8 de enero un nuevo plazo para que los conductores se pongan al día con muchos de los requisitos que solicitan las autoridades de tránsito en Colombia.

Resulta que alrededor del 90% de la flota del transporte público en la frontera venezolana es antigua, y no llena los lineamientos de tránsito que se exigen en el país.

Una excepción decretada por ambas naciones vence en las próximas horas, por lo que en el puente internacional Atanasio Girardot se empezará a solicitar diversos requisitos.

Los transportadores venezolanos argumentan que ellos aún están en crisis, y por ello hacen este pedido.

“Nosotros estamos en crisis en Venezuela, no hemos podido renovar flota y estamos arañando. Esperamos que las autoridades tomen en consideración esto y nos den una prórroga para nosotros poder adquirir mejoramiento de flota y cumplir con otros requisitos”, explicó Celestino Moreno, presidente de la asociación que reúne a los transportadores de la frontera venezolana.

Lo que espera ese gremio es que se les dé un plazo para comprar nuevos vehículos, o una prórroga para comprar Soat y cumplir con la certificación técnico-mecánica, además, de la compra de algunas pólizas especiales que cubran ambos países.

El Gobierno estudia algunas de estas condiciones en materia de movilidad, tomando en cuenta los riesgos que representa que algunos carros transiten sin seguros.

Por ejemplo, en medio de un accidente de tránsito o un siniestro vial que comprometa la vida de personas, las autoridades aún no saben cómo proceder o qué pólizas entran en funcionamiento.