El contador de energía y la evidencia que el apartamento sigue sin ser habitado.
El contador de energía y la evidencia que el apartamento sigue sin ser habitado.
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Sin vivirlo, desde marzo le han llegado 3 recibos de luz que suman más de $ 630 mil

En Alameda del Río.

Uris Barragán Quiroz tenía un sueño de tener su apartamento propio. Ese se le materializó en el mes de marzo cuando se lo entregaron en el conjunto residencial Pelícano, en Alameda del Río, en el norte de Barranquilla.

El ciudadano empezó con la remodelación y al transcurrir el mes de abril le llegó el primer recibo de luz. Oh sorpresa se llevó cuando vio que tenía una deuda con Air-e por un valor de 238.640 pesos. 

“El apartamento me lo entregaron el 14 de marzo aproximadamente y la constructora pagó los recibos anteriores, pero a partir de esa fecha me tocó a mí. En ese primer recibo, de los 238 mil pesos la constructora pagó por allí 80 mil pesos y a mí me tocó el resto”, contó Uris. 

El afectado aseguró que pagó ese primer recibo porque creyó “que era así de alto por la instalación del contador y demás, pero cuando me llegó el segundo recibo ya me empecé a preocupar porque en el apartamento no hay nadie”.

El segundo recibo el cobro fue de 197 mil pesos por un supuesto alto consumo. 

“Me sorprendió ese recibo tan caro y allí comenzó mi lucha con Air-e. Mandé derecho de petición, envié un formato de la Superintendencia de Servicios Públicos y nada. Me tocó pagar el segundo recibo porque mi apartamento lo estaban arreglando y me puse a pensar que la luz era necesaria, pero lo que sí estoy seguro es que los tacos permanecen abajo todo el tiempo. Nada más se suben cuando el muchacho que va a arreglar el apartamento instala una radio pequeña para escuchar su música”, relató el afectado.

Uris comentó que ahora le llegó el tercer recibo en línea con un valor 197.420 pesos.

“Hace unas semanas me llegó el tercer recibo con un valor de 197.420 pesos y Air-e nada. Coloqué una denuncia por Twitter y allí fue cuando reaccionaron y me escribieron, quedando en que iban a venir al apartamento. Luego el lunes festivo escribí y dijeron que ya habían ido, pero cómo van a ir sin haberme llamado”, precisó. 

Uris muestra evidencia con varias fotos que su apartamento aún está sin habitar. Incluso prueba de ella es que los recibos de otros servicios públicos ha pagado solo un básico y bajo consumo en Gases del Caribe y Triple A.  En el primero acumulado han sido 26 mil pesos y el de agua 47 mil. 

Dos de los recibos de energía que le llegaron a Uris sin estar residiendo aún en su apartamento.

Lo que le respondió Air-e

En uno de los derechos de petición solicitado por Uris a Air-e, la empresa aseguró que “una vez recibido el caso procedimos a realizar las verificaciones en el sistema comercial, donde se evidenció que el consumo facturado para el periodo reclamado mayo del 2022, es consecuente a la lectura tomada en el predio, es decir, se puede apreciar que éstos presentan una secuencia lógica generadas por el equipo de medición, por lo que no sería objeto de investigación por desviación significativa al no encontrarse un exceso de consumo provocado por alguna anomalía ajena al servicio".

Ante esta respuesta de la empresa, Uris quedó aún más sorprendido porque no se justifica el alto consumo cuando aún no tiene ni un solo electrodoméstico instalado en el apartamento.

Lo que también le causa extrañeza es que en la misma respuesta que le da Air-e le dicen que “le recordamos que aún estando desocupado el predio, existen otros cargos que deben ser facturados  como los son: impuesto de Alumbrado Público, Tasa de Seguridad y Convivencia Ciudadana, servicio de aseo”, teniendo en cuenta que los recibos que les ha llegado esos cargos no suman ni el 50 % de la factura que recibe. Las facturas están elevadas precisamente por el consumo de energía y no por esos cargos facturados. 

Amanecerá y veremos qué resuelve la empresa con este ciudadano,  a quien más que alegría por tener apartamento nuevo ahora está viviendo un calvario con este servicio público. 

Derecho de petición respondido por la empresa Air-e al ciudadano afectado.

 

 

 

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