El sacerdote Hernando Fagid Álvarez Yacub, conocido como el ‘padre Fajid’, dijo este martes que la orden de la Diócesis de Santa Marta de suspenderlo mediante decreto eclesial corresponde más a razones personales y confesó que se siente "perseguido" .

Según el comunicado del obispo Monseñor José Mario Bacci Trespalacios, a partir de esta medida solo podrá atender a los fieles en situaciones de peligro de muerte, dejando de lado la celebración de misas habituales. Además, en el documento se solicita a los fieles "orar por el reverendo padre Hernando Fagid para que cese en su obstinación".

En diálogo con Seguimiento.co, el padre Fajid expresó su sorpresa por la decisión. "Esto es personal por parte del Señor Obispo conmigo. Desde que llegó, he sufrido persecución"  manifestó. Además, asevera que no existe ninguna investigación moral, canónica o disciplinaria en su contra y dice tener "una hoja de vida intachable".

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Según relató el sacerdote, el conflicto inició aproximadamente seis meses después de la llegada del Obispo a Santa Marta, cuando este le exigió transferir todos sus bienes personales a la Diócesis. En principio Álvarez Yacub pensaba que era 'mamadera de gallo', pero dicha solicitud fue reiterada durante meses, incluso con la presencia de un abogado diocesano listo para llevar a cabo los trámites.

Después de asesorarse, el clérigo confrontó al Obispo, explicando que no estaba de acuerdo con su requerimiento debido a la falta de justificación legal canónica. "Se va a quedar esperando porque el derecho canónico que nos rige a nosotros no me obliga a esto y monseñor aprovecho esta oportunidad para ponerle dos tareas: primero, asesórese bien porque parece que está mal asesorado y segundo, léase el derecho canónico", le dijo.

El párroco sostiene que esto fue lo que llevó a que Monseñor José Mario Bacci tomara la decisión de sacarlo del San Miguel.

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La disputa lleva bastante tiempo, porque el Obispo le pidió aproximadamente 4 o 5 veces que desocupara el lugar, pero este se negó a hacerlo ya que no le daban razón de adónde sería trasladado.

Ambos tuvieron un encuentro en Barranquilla, donde después de mucha insistencia el obispo le dijo "La Parroquia del Cerro de San Antonio va a quedar desocupada, si quieres métete ahí". El padre Fajid se negó argumentando su estado de salud: "Tengo casi 60 años de vida, uno a los 60 años de vida empieza a presentar su quebranto de salud biológico. Por eso yo pago una seguridad social bien alta, porque estoy pendiente de mi chequeo médico general permanente y para mí irme a San Antonio a esta edad sería retroceder en el tema de programa de salud personal que yo tengo" señaló.

Frente a esto, el obispo le manifestó: "Te puedes quedar en Santa Marta pero con tu plata. Cómprate un lote, organiza una parroquia y esa será tu parroquia", según dice el padre Fajid.

“Y resulta que después del 13 de diciembre me llama y me dice quiero que me entregues el cementerio, yo le dije no Monseñor, mientras yo no tenga destino yo no me muevo de donde estoy, tengo mi hoja de vida intachable y puedo exigir mi derecho pastoral porque no tengo ninguna investigación en curso, que me lo impida mientras yo no tenga destino yo no me muevo de donde estoy, entonces eso lo entendió como una desobediencia y aquí estamos en lo que estamos hoy” añadió.

El padre Fajid expresó que continuará celebrando misas en el cementerio hasta que se emita una orden judicial que lo impida.

"Seguiré dando misa hasta que me saquen con orden judicial. Las misas en el cementerio siguen normales, siguen igual y seguimos ahí alimentándonos de la Palabra de Dios", declaró firmemente.