Héctor Sánchez, diseñador de moda.
Foto
Cortesía

Share:

“Me decían mariquita, maricón”: diseñador de moda que denunció matoneo

En adelante, en el conjunto residencial donde vive deben abstenerse de agredirlo verbalmente.

Héctor Sánchez, el diseñador de moda a quien la Corte Constitucional le amparó los derechos fundamentales en el conjunto residencial en donde vive desde hace 23 años en el norte de Barranquilla, confió en que con el fallo de última instancia, 11 de sus vecinos no lo sigan insultando.

En la sentencia que sienta jurisprudencia, se ordena a copropietarios del conjunto residencial Villa Catalina, no discriminar al diseñador gay por su condición sexual.

En el fallo de tutela, la Corte Constitucional protegió los derechos a no ser discriminado, al libre desarrollo de la personalidad y a la dignidad humana del diseñador de moda gay, Héctor Sánchez Escorcia, de 41 años de edad.

Se ordenó a los propietarios del conjunto residencial Villa Catania, cesar de manera inmediata cualquier acto de discriminación ejercido en contra de Sánchez Escorcia y abstenerse de hacer alusión a su condición sexual.

“Me dicen mariquita, maricón” dijo a Zona Cero Héctor Sánchez al tiempo que lo acusaban de hacer “actos indebidos”, hecho que negó el tutelante.

Por su parte Enith Bula, abogada de Caribe Afirmativo que lo asesoró en la tutela sostiene que Héctor Sánchez pudo probar con videos y audios que había recibido “amenazas de muerte”. “Le decían mariquita te voy a matar, el fin que ellos tenían era agredirlo”, reiteró.

Héctor Sánchez precisó también que en adelante, los 11 copropetarios aludidos en la tutela “deben acatar el fallo, yo solicité el cese de los ataques”, dijo.

“Deben abstenerse de todo acto discriminatorio y violencia sexual”, agregó la abogada.

Adicionalmente, la Corte Constitucional ordenó a los copropietarios del conjunto residencial adelantar los trámites tendientes al registro, inscripción y certificación de la personería jurídica de esta copropiedad para definir, por vía de la asamblea general, las fórmulas internas.