Con pesimismo, el exvicepresidente de la República Humberto De la Calle habló hoy en Barranquilla del conflicto armado en Colombia, del accionar de grupos armados en diferentes regiones del país y de los diálogos de paz con grupos guerrilleros.

"Yo no quiero hacer predicciones y menos predicciones negativas. Uno no quiere convertirse en un ave de mal agüero pero lo que estamos viendo son dificultades”, dijo alrededor de un interrogante sobre si le veía futuro a los diálogos regionales.

Señaló que en el caso hipotético de que sea exitoso, “el problema será cómo compaginar esos diálogos regionales con la política nacional de seguridad, pues esa es la queja del ELN”.

El ex negociador de paz en el Gobierno Santos aclaró que sin embargo “es demasiado pronto para decir que va a fracasar pero la realidad lo que nos muestra es que tampoco está teniendo éxito".

Manifestó también su preocupación pues el Gobierno Petro "va por la mitad y el camino comienza a ser estrecho”. “Casi que uno podría decir que como vamos, los logros, pueden que no lleguen", añadió.

Al intervenir en el Foro Federalismo y Centralismo, De la Calle Lombana expresó su preocupación pues en el país, “actualmente hay  zonas donde prácticamente la Nación ha perdido una buena dosis de control".

"Es una cosa extraordinariamente visible, ha habido como una especie de multiplicación de los conflictos, ahora regionalizados, sin mucho interés político sino más bien de dominio territorial hasta el punto de que hay zonas en donde, hay militares que lo han dicho, sienten que el Estado es más bien como árbitro de unas discusiones entre grupos ilegales".

Tras los recientes hechos de alteración del orden público en acciones violentas de la guerrilla, el ex ministro sostuvo que en el territorio nacional , "es evidente que está acompañado de un aumento de las masacres, de extorsión, etcétera".

Sintetizó el tema el exvicepresidente afirmando que “el control territorial se está debilitando de manera preocupante en el país”.

"Uno no quiere tampoco ser excesivamente catastrofista porque todos queremos la paz y queremos la paz total, más allá del nombre, pero sí hay situaciones muy complicadas. El ELN, en sus discusiones por la apertura de diálogos regionales en Nariño ha puesto a temblar la mesa central de conversaciones", finalizó.