La emergencia causada este lunes por el arroyo El Salao, en Soledad, ha sido tal vez la peor de todas porque en este momento Madeleine Cecilia Ramos García y su hija Salomé, de 5 años, se encuentran desaparecidas tras ser arrastrado el vehículo donde se movilizaban.

Vecinos del sector grabaron ayer la furia con que el arroyo pasaba por los lados de Las Moras IV etapa, sitio donde empezó a ser arrastrado el automotor.

Sin embargo, el arroyo no es la primera vez que ha causado emergencias. Ya en reiteradas ocasiones ha arrastrado vehículos, ya que el canal del afluente también es una vía transitable en momentos en que no llueve. 

Muchos de los casos han ocurrido porque los conductores se ven sorprendidos por una creciente súbita cuando está lloviendo mucho más fuerte en la parte de arriba en donde inicia el arroyo, en cercanías al barrio Los Almendros.

El 5 de mayo de este año un camión de mudanza también fue arrastrado en el sector de Las Moras IV etapa. Por fortuna, no hubo víctimas fatales.

De igual manera, el 7 de abril de este año una buseta de Coontransco fue arrastrada por la corriente del agua cuando el conductor se vio sorprendido por el arroyo. Por fortuna, vecinos del sector lograron rescatarlo a él y a unos pasajeros que iban en el vehículo. Del mismo modo la buseta logró ser amarrada.

El hecho ocurrió en ese mismo punto donde ayer el vehículo donde iban madre e hija fue arrastrado.

Otro caso ocurrió el 7 de septiembre del 2016 cuando un motocarro y un furgón fueron sorprendidos por el arroyo, pero en esta ocasión a la altura del barrio Los Cedros. Tampoco hubo víctimas fatales.

Las recomendaciones que hacen las autoridades es que no se metan al arroyo aunque vean que esté seco y hay amenazas de lluvia, ya que el agua puede bajar con fuerza en cualquier momento muy a pesar que no esté lloviendo en la zona por donde transitan, pero sí puede estar cayendo un aguacero mucho más arriba.