Celino Villanueva, considerado el hombre más viejo del mundo, a sus 121 años, se recupera hoy en un hospital del sur de Chile tras ser sometido a una cirugía por la fractura de tres costillas que sufrió al caerse de la cama, informaron fuentes médicas.

Nacido el 25 de julio de 1896 en la sureña localidad de Río Bueno, según sus documentos, Villanueva se accidentó este miércoles en su casa de Mehuín, un poblado pesquero de la región de Los Ríos, a unos 800 kilómetros de Santiago.

Tras el accidente, don Celino fue trasladado al hospital de la cercana localidad de Mariquina, pero su caso fue considerado grave debido a su edad y porque una de las costillas fracturadas le estaba generando problemas en un pulmón.

Por esa causa, fue llevado al hospital de Valdivia, la capital regional, donde fue sometido con éxito a una intervención quirúrgica, de la que hoy se recupera sin mayores complicaciones, dijo a los periodistas el médico Osvaldo Artaza, subdirector del establecimiento asistencial.

"Don Celino está bien, estable y sin ningún riesgo", aseguró Artaza, quien precisó que "está en la Unidad de Tratamientos Intensivos simplemente de regalón (mimado), para que tenga los cuidados óptimos, pero prontamente será derivado a una sala de cuidados más básica y luego a su hogar".

"Se encuentra en condiciones óptimas de salud y esperamos que siga así por muchos años más", añadió el facultativo.

Celino Villanueva saltó a la luz pública el pasado noviembre, cuando el diario británico The Guardian publicó una entrevista y detalles de su vida, escrito por un reportero que viajó especialmente al sur de Chile con ese propósito.

El periódico proclamó entonces el hombre más longevo del mundo a Celino Villanueva, que cuya imagen se hizo más conocida cuando concurrió a votar en las elecciones presidenciales y parlamentarias del 19 de noviembre y en la segunda ronda presidencial, el 17 de diciembre.

El anciano fue conducido por la Policía en una silla de ruedas hasta su lugar de votación, el Liceo Politécnico Pesquero de Mehuín.

Cuando cumplió 118 años, en 2014, fue investido como suboficial mayor honorario de Carabineros y de su historia se sabe poco, solo que durante la mayor parte de su vida se desempeñó como obrero agrícola, que nunca se casó ni tuvo hijos y que actualmente vive junto a una cuidadora, Marta Ramírez, de 85 años.

EFE