¿Cuál podría ser una solución final a los deslizamientos de tierra en el suroccidente de Barranquilla?

Reubicación total, obras de contención y evitar en adelante que zonas de deslizamientos vuelvan a ser ocupadas son alternativas al problema de deslizamientos que se presentan en el suroccidente de Barranquilla.

Loma Roja revive hoy episodios de 2008 cuando los movimientos de tierra hicieron que colapsaran humildes viviendas.

Hoy este sector lo habitan en su mayoría ciudadanos venezolanos y retornados del vecino país. La mayoría llegaron en la última década.

Endry Rolong, líder del barrio Loma Roja hizo un llamado a entidades gubernamentales ante lo que calificó de “total abandono y total descuido” en que se encuentran. 

Aimy Arriaza, una damnificada de Loma Arena, señala los restos de madera de lo que fue su casa hasta el domingo:  "Esta era mí casita. Aquí vivía yo con mis seis hijitos. Se me cayó mí casa. A muchas personas aquí también. De verdad les pido de corazón que nos ayuden. Aquí no tenemos ayuda de nadie”.

Otro drama es el de Yudy Moreno, una adulta mayor, cuya casa de madera está soportada sólo por un trozo de madera y está a punto de caerse.

"Estamos con los nervios de punta. A veces ni duermo. Amanezco trasnochada. Tengo que dormir de día para aguantar. Estamos en una situación de riesgo. Estamos mal. No hallamos qué hacer. Nosotros si tenemos para comer, no tenemos para alquilar. Los alquileres están muy caros. Y a veces uno no tiene".

De las más de 600 familias humildes que habitan la zona, señalan los líderes, ya son unas 170 las que se han caído. Solo en el fin de semana colapsaron 70 casas, de madera y material.

El líder requirió ayuda de organizaciones internacionales por la magnitud de la tragedia repitiendo una emergencia similar a las de 2008. 

Los habitantes de Loma Roja piden una vivienda digna.