Aprovechando un breve periodo de vacaciones, Yady Fernández dejó Islas Canarias, zona en la que residía, para disfrutar de un descanso en Ecuador por unos días. Sin embargo, jamás llegó a pensar que dicho paseo iba a marcar un antes y un después significativo en su vida.

Y es que, un 16 de febrero de 2014, su vida cambió por completo.

Junto a su primo Ramiro Fernández se fue en una motocicleta rumbo a la playa y en la provincia Santa Elena, una camioneta, con el conductor en estado de embriaguez, invadió su carril y los chocó.

Lo que provocó un trágico accidente de tránsito que cobró la vida de Ramiro a sus 37 años y dejó a Yady Fernández sin su pierna izquierda, además de que el conductor emprendió la huida y hoy en día, sigue sin pagar por los daños causados.

En ese momento Yady Fernández tenía 21 años y jugaba como volante en el Club Deportivo Achamán de Santa Lucía, Gran Canaria, donde vivía desde los 12 junto a su madre.

Tras llevar varios años jugando en el fútbol español en distintas categorías, Yady aspiraba a entrar a la mejor división, donde competían clubes importantes como Rayo Vallecano, Atlético de Madrid, FC Barcelona, entre otros.

Pero su sueño se vio frustrado por el accidente, por lo que todo quedó en una ilusión como ella misma define.

"Desde muy pequeña tuve esta pasión tan hermosa de jugar al fútbol. Desde pequeña me destacaba mucho por correr, hacer regates, hacer goles", declaró Yady Fernández a Zona Cero.

Incluso representó a la Selección Canarias durante tres años e integró la prelista de Colombia para el Mundial de Alemania 2011 pero una lesión de meniscos no le permitió estar en la cita orbital, lo que también le habría permitido jugar con Kellis Peduzine, que hoy es su directora técnica en el Mundial de Amputadas.

Yady confiesa que tras el accidente pasó dos meses y medio recuperándose en el hospital, llegó a estar sin signos vitales y la dieron por muerta. Sufrió múltiples fracturas de cadera, lesiones en la clavícula y pulmón, y hasta resistió tres paros cardiorrespiratorios.

"Tenía muchas operaciones porque el pulmón cogió bacterias y me tuvieron que ir amputando (la pierna izquierda) un poco más, un poco más... todos los días me hacían pruebas de sangre y tuve una infección que no me dejaba estar bien, era muy dolorosa y se me subía mucho la fiebre y me daba escalofríos", dijo Yady Fernández, quien en la primera semana en el hospital estuvo en UCI.

Tras casi tres meses en Ecuador, Yady Fernández recibió el alta y regresó a Cali, su ciudad natal, donde recibió mucha ayuda para salir adelante.

"Cuando salí del hospital de una me regresé a Colombia, en el que me recibió Ríter López. Él fue uno de los ángeles, me dio terapias, me dio psicología, me dio alimentación, fue un padre y estoy muy agradecida. Y por otro lado, como secretaria de Deportes Clara Luz Roldán me apoyó infinitamente en el tema laboral, deportivo... entonces son mis ángeles y vivo muy agradecida con ellos y con todos los demás que a partir de ahí empezaron a sumarse a mi historia de vida", agregó.

Fernández reconoce lo difícil que fue para ella retomar vida y confiesa que cayó en depresión al no poder jugar más fútbol pero su deseo de continuar practicando un deporte la llevaron a interesarse por el ciclismo.

Hasta tal punto de ser subcampeona nacional de ciclismo de pista en la categoría C2 el pasado 27 de octubre en una competencia disputada en Boyacá.

"Lógicamente uno cae en depresión, uno no sabe ni para dónde coger hasta que un día se me dio la oportunidad de ser ciclista. Eso se convirtió como en una promesa para mí misma de poder superar este deporte que es tan difícil y volverme una subcampeona nacional. Ha sido de mucho sacrificio, mucho entreno, mucha dedicación y disciplina".

Su llegada al Mundial de Amputadas

Por primera vez, Yady Fernández está jugando fútbol para amputadas y su integración a la Selección Colombia se dio muy rápido. Solo tuvo una semana de entrenamiento con el equipo tras incorporarse a la concentración el 28 de octubre, justo un día después de ser subcampeona nacional de ciclismo de pista.

"Don Edgar (Blanco) creyó en mi talento sin conocerme. Don Édgar decía: 'oye, ya te necesitamos, ven'. Y yo decía: 'don Edgar, yo no puedo decidir porque yo tengo una metodóloga y ella tiene que responder por mí'. Y en fin fui a Boyacá, hice una gran presentación y mi metodóloga me dio luz verde. Don Édgar de una me compró tiquetes", reconoció.

Y en el Mundial de Amputadas, Yady Fernández registró 4 goles en 5 partidos, siendo la máxima goleadora de Colombia y ubicada en los tres primeros lugares del torneo, ayudando con esos tantos también, a que el país alcanzara la gran final y el título tras vencer 2-1, por tiros desde el punto penal, a Estados Unidos.

"Ser campeona es un sueño en el que uno no quiere despertar. Es extraordinario lo que siente. Le pusimos alma y corazón para ganar", señaló Yady, quien falló uno de los cobros de Colombia desde el punto blanco del penalti.

Le marcó gol a Polonia, Brasil, Perú y Kenia.

¿Fútbol o ciclismo?

Ahora Yady Fernández no sabe qué hará con su carrera deportiva, si se dedica al fútbol o al ciclismo de pista plenamente.

"Una pregunta que yo no sé en este momento, la verdad no la sé", dice Yady, quien a pesar del terrible accidente que sufrió hace 10 años, hoy tiene la oportunidad de destacar en dos deportes.