La contratación de Teófilo Gutiérrez fue anunciada el sábado por el Bucaramanga.
La contratación de Teófilo Gutiérrez fue anunciada el sábado por el Bucaramanga.
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@ABucaramanga

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Teófilo Gutiérrez, el 'Perfume' que quiere mantener intacta su fragancia

El delantero barranquillero, de 37 años, inicia una nueva aventura en el Bucaramanga, deseoso de demostrar que su fútbol sigue vigente.

Una calidad innegable, un temperamento difícil, un carácter indomable, amado e idolatrado por muchos y resistido por otros. A los 37 años, Teófilo Gutiérrez sigue dando de qué hablar y durante más de un mes mantuvo a la expectativa a todo el país futbolero sobre cuál sería su nuevo destino tras rescindir su contrato con el Deportivo Cali, en diciembre pasado.

Finalmente, el sábado, Teo arregló su vinculación, inicialmente por seis meses, con el Atlético Bucaramanga, luego de su intento fallido de regresar al Junior y de fracasar las negociaciones para llegar al Unión Magdalena.

Una puerta tras otra se le fue cerrando al delantero de La Chinita. Un día después de afirmar que no tendría problema de jugar en Nacional, el equipo verdolaga, a través de su técnico Paulo César Autuori, lo descartó y tampoco pudieron llegar a feliz término las conversaciones con Santa Fe y Águilas Doradas.

El nombre de Teófilo Gutiérrez empezó a ser sonoro en el segundo semestre de 2008 cuando, con el fantasma del descenso acechando al Junior, el técnico Julio Comesaña lo catalogó como el mejor delantero del fútbol colombiano, apreciación que para muchos fue exagerada.

Teo ya se había destacado en el torneo de ascenso con el Barranquilla Fútbol Club, pero en ese semestre jugó un papel fundamental para que Junior se salvara del descenso y, al año siguiente, llegara a la final, que perdió contra Once Caldas, en el Metropolitano. Teófilo fue el máximo goleador del campeonato con 16 tantos, pero su llanto inconsolable después de esa derrota simbolizó la decepción de los junioristas.

El sueño europeo

A comienzos de 2010, el barranquillero partió hacia el Trabzonspor de Turquía, en donde no se amañó y decidió regresar a Colombia a esperar una nueva oportunidad en otro país. Racing de Avellaneda fue su siguiente destino y rápidamente, con su estilo de juego, se ganó el cariño a los aficionados de la ‘Academia’ y el respeto del de los demás equipos.

Sin embargo, su paso por Racing estuvo marcado por los escándalos. El más sonado fue el que protagonizó luego de un clásico de Avellaneda contra Independiente, en el que marcó un gol y luego se fue expulsado. Racing perdió 4-1 y, al ingresar los jugadores al vestuario, Teo fue increpado por varios compañeros, entre esos, el portero Sebastián Saja.

La respuesta del barranquillero, después de intercambiar piñas con todos ellos, fue sacar una pistola, que después se supo que era de paintball, que hizo salir corriendo y despavoridos a sus compañeros. El episodio también marcó el fin de la carrera como entrenador de Alfio 'Coco' Basile, quien intentó, sin éxito, calmar al barranquillero.

Allí terminó el idilio de Teo con Racing y su siguiente paso fue Lanús, con el que solo podía jugar la Copa Libertadores. Pero mientras Lanús lo esperaba para iniciar la pretemporada para el torneo siguiente, Teófilo prefirió quedarse en Barranquilla en donde, después de una negociación que alcanzó ribetes de novela, terminó aceptando una oferta de Junior.

Su segunda etapa en el equipo rojiblanco duró apenas seis meses, ya que su rendimiento no colmó unas expectativas que eran grandes por su contratación y la de Dayro Moreno.

La siguiente estación fue Cruz Azul de México, con el que llegó a la final del torneo, la cual perdió con el América.

Estando en México despertó el interés de River Plate, en donde vivió una de las mejores etapas de su carrera futbolística. Con el club millonario fue campeón de la Copa Sudamericana de 2014 y recibió el premio ‘Rey de América’ por parte del diario El País de Uruguay.

En 2015 fue pieza clave para la conquista de la Copa Libertadores, cuyas instancias finales no pudo disputar ya que fue transferido al Sporting de Lisboa.

En el club portugués solo jugó una temporada, ya que no resistió la tentación de volver a Argentina, esta vez a Rosario Central. Con el club de Arroyito se le recuerda por el festejo de un gol a Boca, en La Bombonera, haciéndose la franja cruzada de River, lo que le valió la tarjeta roja, y provocó la ira de los jugadores del club xeneize, entre esos Carlos Tévez.

El ‘ChaTeo’

En junio de 2017 logró su anhelado retorno al Junior, un pedido que le había hecho su abuela paterna, fallecida un año antes, que quería verlo campeón con el equipo de su tierra. Su presentación oficial llevó 50 mil espectadores al estadio Metropolitano Roberto Meléndez, en donde anunció, con voz firme y convencida, que venía a ganar muchos títulos.

Ese año conformó una llave fabulosa con Yimmi Chará, que dio origen al famoso ‘ChaTeo’. Sin embargo, con esta dupla, Junior solo pudo conquistar el título de la Copa Colombia.

Pero en el segundo semestre de 2018, ya sin Chará, que fue vendido al Atlético Mineiro, Teófilo por fin logró estampar la octava estrella en el escudo del Junior, tras superar en la final al Medellín. Días antes había vivido otra decepción al perder, por tiros desde el punto penal, la final de la Copa Sudamericana ante Athletico Paranaense.

El título de Liga con Junior era el que más deseaba, el que le hacía falta por conseguir y lo revalidó seis meses después en la final contra Deportivo Pasto, en Bogotá, ganada en la tanda de penales.

Con Junior también cosechó los títulos de la Superliga de 2019 y 2020, pero cuando todo hacía presagiar de que se iba a retirar vestido de rojiblanco, el club decidió no renovarle el contrato, consecuencia de un semestre en el que jugó poco debido a sus molestias físicas.

Al Cali

Aterrizó, con un contrato especial, el día en que se cerraban las inscripciones, en el Deportivo Cali, donde no solo se convirtió en capitán de campo, sino que lo lideró hacia la conquista del título en la Liga Colombiana. Nuevamente volvió a estar en boca de todos, demostrando que su fútbol se mantenía vigente.

Del Cali no salió de la mejor forma. Tras un año de malos resultados, en el que ocupó los últimos lugares, en donde vivió el drama de los salarios atrasados, dejó la institución verdiblanca con la esperanza de regresar al Junior. Fuad Char, cada vez que lo consultaban sobre esta posibilidad, la descartaba de tajo, lo que obligó a Teo a explorar otras opciones.

Se daba como un hecho que iría al Unión Magdalena, pero un cambio de condiciones a última hora, obligó a su dueño, Eduardo Dávila, a desecharlo. El viernes, Bucaramanga activó el operativo para contratarlo y el sábado Teo llegó a la ‘Ciudad de los Parques’, en el mismo vuelo que transportó al Junior y horas más tarde fue anunciado oficialmente como nuevo jugador del club leopardo.

Teófilo Gutiérrez fue uno de los jugadores que le devolvió a Colombia el fervor por su Selección. Bajo el mando de José Pékerman contribuyó a la clasificación a la Copa Mundial de Brasil-2014, en donde marcó un gol contra Grecia.

Fue capitán de campo de la Selección Colombia que participó en los Juegos Olímpicos de Rio-2016, en los que se reportó con tres goles.

Se quedó esperando el llamado para Rusia-2018 y para la Eliminatoria hacia Catar-2022. Creía que todavía podía dar una mano, no así quienes tomaban las decisiones en el banco técnico del combinado nacional.

Teófilo Gutiérrez quemará sus últimos cartuchos en el Bucaramanga y tratará de seguir deleitando, no solo a los seguidores de su nueva escuadra, sino a todos los amantes del buen fútbol en Colombia para seguir haciendo honor a su singular apodo: 'El Perfume'.

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