Jorge Solari tiene 83 años y todavía trabaja en el club Renato Cesarini.
Jorge Solari tiene 83 años y todavía trabaja en el club Renato Cesarini.
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Instagram Jorge Solari

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"No fuimos campeones con Junior por esa bola que pegó en el palo": 'Indio' Solari

El equipo rojiblanco, que bajo el mando del argentino marcó 100 goles en 1983, es considerado uno de los mejores en sus 100 años de historia.

El partido está a punto de acabarse en un repleto estadio Romelio Martínez. El técnico del Junior, Jorge ‘Indio’ Solari, desesperado y pegado a la raya, manda a todos sus jugadores al ataque indicándoles que se agota el tiempo. El juego contra Nacional va 1-1 y Junior necesita marcar un gol más para coronarse campeón. 

Uno de los jugadores que se va arriba a buscar el gol es el ‘Patón’ Bauza, un gigante defensa que ese año marcó 14 tantos y al que Solari tiraba como centro delantero cada vez que la cosa estaba complicada. Varias veces le dio resultado.

En Cali se está dando el resultado que necesita Junior para dar la vuelta olímpica: América, el otro aspirante al título, empata 1-1 con Millonarios. 

De repente se presenta una jugada clara de gol sobre la portería que da para la calle 72, hacia donde ataca Junior. Fernando Fiorillo, autor del gol del empate del equipo tiburón, remata y estrella la pelota en el vertical. El rebote se pasea por toda la línea de gol; el portero de Nacional, la 'Gallina’ Calle, está vencido y Eladio Vásquez, delantero del Junior que entró en el segundo tiempo, sorprendido, la ve pasar sin hacer nada para meterla. Solo era soplarla y esa pelota entraba al arco verdolaga.

Fue la última jugada del partido, que terminó empatado a un gol. Mientras en Cali los americanos celebran su tercer título, en Barranquilla, el ‘Indio’ Solari entra a la cancha a consolar a cada uno de sus jugadores y a reconocerles el esfuerzo que realizaron por tratar de quedar campeones.

El título hubiese sido lo más justo para Junior, que tuvo un año brillante, que a lo largo del campeonato marcó 100 goles y que solo fue superado por el 0.75 de bonificación que tenía el América en el octogonal.

Solari, cuyo preparador físico era su hermano Eduardo, campeón como jugador con Junior en 1977 y después técnico en 1986, no continuó para el año siguiente, pero ese equipo que dirigió quedó en la memoria de los hinchas de la época.

El 'Indio' también fue preparador físico de Junior en el 77, cargo al cual renunció para asumir la dirección técnica de Millonarios. 

‘El Junior de los hermanos Solari’, como le decían, es considerado uno de los mejores de la historia, así no haya quedado campeón. El recuerdo es imborrable. Con Carlos Babington llevando la batuta y una delantera temible con William Knight, Fernando Fiorillo y Kiko Barrios, que entre los tres marcaron 52 goles. Un mediocampista que el 'Indio’ convirtió en puntero izquierdo: Amín Bolívar, uno que tenía cuatro pulmones: Omar Alfredo Galván; un portero mundialista como Daniel Carnevali y un defensa goleador como Edgardo Bauza.

"Eran buenos jugadores, cualquiera que usted nombre la gente lo tiene que recordar con cariño porque estuvieron en un plantel muy bien formado y bien preparado", afirma el argentino.

El Junior de 1983 que logró el subtítulo con el 'Indio' Solari.

Solari, hoy con 83 años, goza de buena salud, aunque dice que está un poco rengo por una lesión en su rodilla. Vive a 30 kilómetros de Rosario y es el director del club Renato Cesarini, que tiene 30 divisiones, 56 canchas y cuyo predio se encuentra ubicado frente a su casa. Recuerda que de allí salieron Javier Mascherano y Martín Demichelis. 

"No fuimos campeones por esa bola que pegó en el palo, eh", responde animado al recibir la llamada de Zona Cero, que lo contactó con motivo del centenario del Junior.

Después del 83, el 'Indio' no volvió a Barranquilla, ciudad de la que tiene un pedazo de su alma, ya que aquí nació su sobrina Liz, famosa modelo argentina, hija de Eduardo. Anhela regresar para saludar a viejos amigos como el 'Papi' Peña y Fuad Char, y conocer el estadio Metropolitano.

¿Cómo se dio su contratación por Junior en el 83?
Fuad Char, con quien había hecho amistad, me vino a buscar y me preguntó si quería ser director técnico del Junior. Le dije que con mucho gusto, porque la habíamos pasado muy bien como preparador físico (de José Varacka).

¿Cómo se fue armando ese equipo?
Fuad Char era una persona muy inteligente, venía directamente (a Argentina) y hablaba con los técnicos, se asesoraba y se hacía aconsejar de todo el mundo. Hasta al taxista le preguntaba qué tal era Bauza, de quien le dije que nos iba a servir, un marcador central y encima goleador. Le dije que hacía 6 o 7 goles por torneo. El primer partido en Bucaramanga lo ganamos y el 'Patón' Bauza metió dos goles. Se asesoraba de los técnicos, pero después averiguaba e investigaba.

¿Cómo le fue con Édgar Perea?
Édgar era más conocido que los jugadores por su manera de transmitir, su fuerza, su fanatismo eran muy buenos. Jugar en Barranquilla, el calor nos ayudaba un poco, los equipos que venían de otras zonas que eran menos cálidas lo sentían en el segundo tiempo. Nosotros teníamos un buen equipo, que jugaba muy bien, que hacía circular la pelota, que era el fútbol que queríamos y nos gustaba.

¿Bauza en Junior superó sus expectativas?
Era goleador. Yo trabajé en Rosario Central en divisiones inferiores con Griguol y allí lo fichamos para la quinta división, así que lo conocía desde chico. Tenía mucha capacidad, buena persona, trabajador y encima era un marcador central que se iba al ataque. A mí no me sorprendió porque ya lo conocía, sabía todas las virtudes que tenía. En esa época Central económicamente no estaba bien, necesitaba vender y nosotros aprovechamos.

Ese equipo marcó 100 goles, con un gran aporte de Carlos Babington. 
Babington era lento, no era rápido, pero era muy técnico. Él se acomodaba de un lado para el otro, daba la espalda, gambeteaba bien y lanzaba muy bien, pasaba en corto y en largo. Todo eso le dio la posibilidad de triunfar y la época también lo ayudó porque no lo exigían tanto. Ahora le ponen un marcador al lado y no se la dejan agarrar si usted también no corre como el rival.

¿Por qué nunca más volvió al Junior?
No sé qué pasó que no fui de vuelta. Junior era un equipo poderoso económicamente, no tenía problema de nada y la relación siempre fue buena. A Fuad Char me gustaría verlo y darle un abrazo y lo mismo que a todos los muchachos porque tengo buenos recuerdos. No me acuerdo la secuencia, si fui a México antes y después fui a Barranquilla. No tuve problemas, la relación fue muy buena con todo el mundo. 

El 'Indio' junto a la estatua que le hicieron en el predio de Renato Cesarini.

¿Cómo está Eduardo, su hermano?
Eduardo está bien, ya está retirado, se cansó. El fútbol es lindo y apasiona, pero satura un poco por los viajes, uno está siempre lejos de la familia, las concentraciones, cuando tienes que ir de un país a otro y mover a los chicos de colegio.

Envíele un mensaje a los junioristas, que se preparan para el centenario del equipo.
A toda la gente de Barranquilla, que nos trató muy bien, un abrazo grandote y un recuerdo permanente- Soy tío de Liz, que nació en Barranquilla y mi hija Natalia está casada con Fernando Redondo (exfutbolista). Tenemos un recuerdo grato, muy lindo y me acuerdo que hicieron una fiesta y primero me habían invitado, pero después se perdieron y no terminamos de solucionar todo, pero me gustaría estar en alguna fiesta con todos los muchachos y verlos. Estoy rengo de la rodilla (risas), el fútbol me dejó cosas buenas, pero también se llevó algo de mí ya que no me deja caminar bien. Tampoco conozco el estadio nuevo y me gustaría conocerlo. 

Después de Junior, el 'Indio' Solari regresó a su país para dirigir a Newell's y después a Independiente, con el que salió campeón en 1989. En su segunda etapa en Newell's, en 1993, fue técnico de Maradona. Dirigió al Tenerife de España y a la selección de Arabia Saudita en el Mundial de Estados Unidos 94. 

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