Miguel Borja
Miguel Borja
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Dimayor

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Miguel Borja rescató a Junior, cuando Águilas iban a volar con un punto del Romelio Martínez

Los barranquilleros ganaron 2-1 con un penal de oro en el minuto final ejecutado por el goleador. 

En un duelo donde utilizó a las alternativas, Junior logró vencer la noche de este domingo a las Águilas de Rionegro, gracias al poder goleador de Miguel Ángel Borja, quien en el tiempo de adición convirtió el penal determinante para sellar el 2-1 que lo deja en la quinta casilla con 16 unidades. 

Luis Amaranto Perea tuvo su primer reto como director técnico en toda estricta forma del equipo. No solo tuvo que tomar determinaciones pensando en el duelo de este domingo, sino que además proyectar las condiciones de los jugadores con mira al partido del martes por Copa Libertadores. 

Su apuesta fue arriesgada, enfrentar el duelo ante Rionegro con un equipo lleno de alternativas, por no decir suplentes. Eran contados con los dedos de una mano los que podían considerarse inicialistas inamovibles. Es más, la titularidad en este juego fue casi una declaratoria de suplencia para la próxima semana para varios. 

Sin embargo, el reto había que asumirlo y parece que las cosas le estaban saliendo bien desde temprano. Junior comenzó con la posesión del balón y jugando de manera práctica, con pases progresivos y tratando de alimentar a la gran sorpresa en el equipo, un Michael Rangel que se quiso asociar con sus compañeros. 

A los 4 minutos, los de casa tuvieron su primera aproximación mediante una pelota quieta. Fue una jugada de laboratorio que concluyó con un disparo rasante de Fabián Viáfara, que se fue apenas abierto del arco custodiado por Carlos Bejarano.

Rionegro trataba de aguantar cerca a su arco, a la espera de algún error para sacar provecho. Así, a los 14 minutos, Sebastián Viera se vio exigido para salvar de manotazo un disparo de media distancia de Jader Obrián, luego de una desconcentración en el mediocampo. 

Lo que no esperaban los visitantes, era que sus mismos errores le mostraron el arco a Junior. A los 23 de acciones, un inquieto Luis ‘Cariaco’ González recogió un rebote en el área, producto de un balón dividido por Rangel, y sacó un derechazo que hizo meter las manos a la candela al meta Bejarano para mantener el 0-0. 

No fue sino hasta los 33 de partido que la insistencia del venezolano tuvo fruto. Luego de una jugada donde recuperaron rápido la pelota, González quedó de frente al arco y esta vez midió bien la posición de Bejarano para ajustar un tiro inatajable que se guardó en las redes para abrir el marcador. Un 1-0, justo para los dominadores claros del juego. 

Luis Amaranto Perea se marchó tranquilo al vestuario, con el marcador a favor. Pero no era para confiarse, quedaba todo un tiempo y era necesario asegurar el marcador para luego comenzar a manejar las acciones. Tendría que encontrar el mensaje adecuado en el camerino para mantener al equipo en la misma línea.

Para el reinicio del duelo, Perea decidió sacar de la cancha a Rangel, de un partido aceptable, para colocar al actual goleador del conjunto, Miguel Ángel Borja. Un cambio que resultaría siendo vital.   

La segunda mitad encontró a un conjunto más agresivo, en busca de marcar el tanto que los pudiera hacer salir de la situación complicada en la que se encontraba. De otro lado, Junior perdió manejo de la pelota y se notó más frágil que en la primera mitad. 

Fue precisamente una pérdida de balón en el mediocampo lo que le permitió a los antioqueños llegar al empate parcial, a los 60 minutos. Orbián se descolgó por la derecha, ganando la espalda de Jeison Angulo, para fusilar a Viera y colocar la paridad. 

Junior cayó en un bache, profundo y oscuro. No había ideas en el campo, y Perea movió sus opciones haciendo ingresar a Luis Sandoval, Edwuin  Cetré y Sherman Cárdenas a la cancha por Daniel Moreno, Criistan Higuita y Luis González. Sin embargo, no parecían dar resultados. 

No fue sino hasta el último minuto, 90+3, que la genialidad de Borja se hizo presente. Desde la banda izquierda emprendió una larga diagonal de más de 40 metros al área con la pelota dominada para ser cruzado por el portero Bejarano, para un tiro penal. 

El mismo afectado tomó el balón para el cobro y con la tranquilidad del matador, engañó al meta para depositar la pelota a la derecha mientras Bejarano volaba a la izquierda. El 2-1 definitivo para que Junior sumara tres puntos importantes.

La victoria encarrila a Junior en la Liga. Pero más que eso, lo llena de tranquilidad para el reto del martes ante Independiente del Valle, partido al que llegara habiendo ganado sus últimos tres duelos, curiosamente todos marcando en dos oportunidades. 

Junior quedó con 16 puntos a uno del líder, Deportivo Pasto, en la quinta posición. Y su próximo duelo de liga será ante el Envigado, en condición de visitante.

 

 

 

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