“Le hablé de mi papá, y lloró”: hermana de Luis Quiñones, quien permanece en UCI
Familiares y amigos, a la espera de la evolución.
No se conoce un nuevo parte médico del caso del boxeador Luis Quiñones, en coma inducido tras caer el pasado sábado a segundos de terminar el combate pactado a 8 asaltos.
Miguel Guzmán, entrenador de Quiñones, contó a Zona Cero lo que le dijo que le dijo María Alejandra Quiñones, hermana del pegador de 25 años:
"La hermana nos comentó que cuando ella subió a verlo, le habló, le contó cosas (del papá) y él lloró. Después ella le fue a secar las lágrimas y espabiló".
Tras este episodio, "los médicos dicen que esa es una muy buena señal. De igual forma, el médico fue claro nos dijo que son 72 horas que hay que esperar. Él está grave sí. Pero los signos vitales son excelentes por la juventud que tiene".
Guzmán contó que Luis Quiñones "está sedado, pero estable".
Igual María Alejandra, al salir hoy de la visita a su hermano contó que "él está dormido, y en el momento el dictamen es reservado por su complejo estado de salud".
"Apenas le hablé de mi papá el ojo le comenzó a lagrimeó". "Mi hermanito me escuchó y yo sé que Dios lo va a levantar de esa cama, es una batalla grande que va a pelear y la va a ganar" "Toca esperar la evolución", señaló.
Este martes, al igual que ayer, lo vio dormido "con sus aparatos y a la espera de que se desinflame y empiece a evolucionar".
Según expertos en el boxeo, se trató de una pelea pareja y no explican el por qué la lesión tan grave que "si se terminaba la pelea en ese momento era empate porque era una pelea pareja*.
Quiñones, de 25 años, disputaba el título nacional welter.