Los clubes de la Serie A italiana (Primera División) invirtieron más de mil millones de euros en la recién concluida sesión de mercado veraniego, con el fichaje del portugués Cristiano Ronaldo por el Juventus como absoluto protagonista.

Tras vivir años complicados a nivel económico y deportivo, el fútbol italiano intentó dar a base de talonario un decidido paso adelante en el último mercado, cerrado el viernes a las 20.00 locales (18.00 GMT), y recobrar el prestigio pasado.

El equipo que más invirtió fue el Juventus, que gastó cerca de 250 millones de euros para construir una plantilla capaz de pelear con todo por la soñada Liga de Campeones, además de mantener por octavo año consecutivo el trono en la liga italiana.

Tras rozar la gloria europea dos veces en los últimos cuatro cursos, el Juventus pagó 112 millones de euros al Real Madrid por Cristiano, cinco veces campeón de Europa y protagonista con 451 goles en 438 partidos con los blancos.

Se convirtió en el fichaje más caro de la historia del fútbol italiano, al superar los 90 millones que el propio Juventus pagó al Nápoles en 2016 para hacerse con el argentino Gonzalo Higuaín.

También será el futbolista con la ficha más alta de la Serie A, al ganar unos 31 millones de euros por cada una de las cuatro temporadas previstas por su contrato.

Los turineses reforzaron además su plantilla en todos las posiciones a base de millones: pagaron 40,4 millones por el portugués Joao Cancelo, 35 millones por Leonardo Bonucci, 12 por Mattia Perin, además de ejercer la opción de compra a título definitivo del brasileño Douglas Costa (40 millones).

El segundo equipo que más gastó fue el Roma del director deportivo español Ramón Rodríguez Verdejo "Monchi" (136 millones), que con las ventas del meta brasileño Alisson Becker al Liverpool (62,5 millones) y del belga Radja Nainggolan (38 millones) al Inter financió hasta once fichajes.

Destacan los 26 millones de euros pagados al Sevilla por el francés Steven Nzonzi, los 24 abonados al París Saint Germain por el argentino Javier Pastore y los 17 pagados al Ajax por el holandés Justin Kluivert, hijo del exdelantero del Barcelona, Patrick Kluivert.

El podio de los que más invirtieron está completado por el nuevo Milan estadounidense, que pagó un total de 122 millones para fichar al argentino Gonzalo Higuaín, los españoles Samu Castillejo y Pepe Reina, el uruguayo Diego Laxalt o el francés Timoué Bakayoko.

El "Pipita" llegó a Milán procedente del Juventus cedido por 18 millones con obligación de compra fijada en 36 millones mientras que el exjugador del Villarreal Samu Castillejo fichó por los "rossoneri" en una operación que ronda los 25 millones de euros.

Entre las demás inversiones más destacadas, el Nápoles pagó 30 millones al Real Betis por el español Fabián Ruiz y 25 al Bolonia por Simone Verdi, mientras que el Lazio abonó unos 15 millones al Sevilla por el argentino Joaquín Correa.

Sin embargo, también fue un verano marcado por grandes operaciones soñadas y finalmente no cerradas.

Es el caso del Inter, que soñó durante varios días con el posible fichaje del croata del Real Madrid Luka Modric, antes de que el club blanco lograra retener al Balón de Oro del último Mundial.

O también el del Lazio, que no cedió a las propuestas millonarias recibidas por el centrocampista serbio Sergej Milinkovic-Savic, uno de los jóvenes futbolistas de más talento del fútbol italiano y europeo.

EFE