Junior llega vivo a la última fecha: un doblete de ‘Cariaco’ mantiene la esperanza
Salió adelante pese a las lesiones y expulsiones que le complicaron el partido.
Sobreponiéndose a dos expulsados, lesionados e infortunios, Junior de Barranquilla le ganó al descendido Cortuluá por 2-1 la noche de este domingo en el estadio Metropolitano, para mantener encendida la llama de la esperanza hasta la última fecha del rentado colombiano.
En un partido donde no podía salir mal nada, las tragedias se comenzaron a suceder una detrás de otra, colocando contra las cuerdas a los barranquilleros para jugar con el drama, poniendo a prueba los nervios de los aficionados y el temple de los jugadores dentro de la cancha.
La avalancha de lesionados, obligó a que el suspendido Julio Comesaña pusiera a jugadores como Fabián Viáfara a y un resentido Carlos Bacca, a quién esta semana el físico le pesó.
Nada terminar los himnos, Carlos Bacca tuvo que ser atendido por un kinesiólogo, quien le aplicó linimento en la rodilla, como una medida para manejar el dolor en su rodilla que lo venía aquejando hace varias fechas. Fue un presagio de lo que vendría.
En cuanto al juego, Junior quiso imponer condiciones de entrada, en una jugada entre Fabián Sambueza y Luis González, que terminó con el venezolano estrellando la bola en el pecho del arquero Ernesto Hernández, en el primer campanazo de alerta del partido.
Pero cuando la gente en la tribuna se quiso entusiasmar, llegó un planchazo con los taches arriba de Fabián Viáfara sobre Alexis Castillo Manyoma, que, al ser revisada por el VAR, le avisó como acción de posible roja al juez Jhon Alexander Ospina, quien, tras chequear en la pantalla, expulsó al defensa para dejar a los 9 minutos con uno menos a los locales.
Fue ahí, que hubo un momento de alegría. Un tiro libre perfectamente pateado en gotera al segundo pago por González, se coló al fondo de las redes, tras un mal movimiento del cancerbero Hernández, que de adelantó un paso al otro palo y dejó su portón a disposición para el 1-0.
Con uno menos, Junior intentó aguantar, pero muy rápido llegó al baldado de agua fría, pues no logró cerrar sus líneas y pronto sufrió el gol de la igualdad.
A los 23 de juego, Fabio Delgado se robó la banda y cruzó una pelota al segundo palo donde apareció Juan Sebastián Herrera para empujar la pelota al fondo y desinflar a todo el mundo, en un juego donde las adversidades no paraban.
Sin embargo, cuando peor la pasaba, Junior rompió cinco minutos de dominio total de los tulueños para pisar el área en una jugada individual de Edwuin Cetré, a quien Harold Cummings bajó en el área para un claro penal.
A los 36 minutos fue un buen cobro de ‘Cariaco’ el que le devolvió la ventaja a los barranquilleros para volver a ilusionar a los hinchas con el 2-1, que los ponía otra vez en carrera.
De inmediato, Carlos Bacca fue retirado de la cancha para entrar a reforzar la defensa, con el ingreso e César Haydar. El goleador porteño se fue molesto, hasta pateó una bola de la rabia y se marchó directamente al camerino, probablemente disminuido por su lesión.
Sobre la recta final de la inicial, Sebastián Viera tiró la pelota a fuera pidiendo con urgencia asistencia médica, por un dolor en el tobillo ¿Qué más podía salir mal? Sin embargo, se recuperó para seguir atajando.
Habiendo superado todas las angustias de la primera mitad, Junior se fue al descanso esperando las indicaciones a la distancia de Julio Comesaña por intermedio de Roberto Peñalosa.
La segunda mitad, sin cambios en los de casa, mostró a un equipo intentando ser agresivo y con escaramuzas, para ver si podía rápidamente sentenciar el juego y administrar lo que quedaba.
Los minutos finales fueron irreales. Con la posibilidad latente de un solo error, un tanto en contra, dejara por fuera de la competencia a Junior, el ambiente se puso tenso desde la grada que exigía un cambio a Peñalosa.
Dudas, lesiones en la cancha, temperatura en ebullición. Un verdadero drama que se matizó con seis minutos de adición, al final los elegidos para entrar fueron Yeison Gordillo y Nelson Deossa, mientras que en el banco un desesperado Bacca asumió el rol de entrenador para indicar a sus compañeros qué hacer en la cancha, mientras salían ‘Cariaco’ y Cetré.
Este último se trenzó en una disputa con el asistente del banco del Cortuluá, lo que le valió ver la tarjeta roja, para el segundo expulsado de la noche y luego una pelea en el túnel al camerino que sin duda dejará huella en el informe del juez.
Llegó el pitazo final y contra todo, las desgracias, lesiones, expulsiones y demás, Junior llegará vivo a Montería para con 28 puntos para jugarse la vida en la última jornada.