Junior no logró encadenar dos partidos ganados, porque en esta oportunidad en el primer duelo ante la escuadra de Tigres en la historia de los barranquilleros, perdió por un doloroso 1-0 que dejó prácticamente inalcanzable su deseo de avanzar de ronda.

Como se le ha vuelto costumbre, en realidad una muy mala costumbre, Junior volvió a perder contra un equipo debutante en el torneo de primera división. Y esta vez jugando un partido realmente malo.

Los aficionados barranquilleros que se acercaron al estadio Metropolitano de Techo querían calentar la helada noche bogotana con los cánticos y el aliento de siempre. Pero el fútbol jugado por Junior en las primeras de cambio sólo invitaba al bostezo en las gradas.

No fue sino hasta los 22 minutos de las acciones que la visita logró hilvanar alguna jugada que pudiera ser considerada de peligro. El volante ofensivo Jarlan Barrera le metió la pelota a Bernardo Cuesta en el segundo palo y la esférica se fue lejos del control del argentino.

Sin embargo, Tigres hizo efectivo su derecho a réplica tan solo dos minutos más adelante, en una pifia defensiva de Junior. El atacante Iván Rivas quedó en las barbas de Sebastián Viera, quien en un rápido achique logró conjurar el peligro.

El partido pasó por largos periodos de letargo. A pesar que los rojiblancos trataban de asumir el protagonismo, no había grandes ideas que fluyeran desde los pies de Sebastián Hernández y el mismo Jarlan, que simplemente se dedicaron a abusar de los desbordes de Toloza, al punto de volverlo repetitivo y predecible.

A los 37 de compromiso, llegó la más clara del duelo para los visitantes: el lateral derecho David Murillo lanzó un buen pase filtrado a Cuesta, quien de primera intención la mandó a la base del poste izquierdo.

Antes de la culminación de las acciones, Toloza volvió a desbordar por la izquierda y cuando tiró el centro la pelota golpeó la mano de un defensor bogotano. Una clara acción para tiro penal, que el juez sin embargo prefirió no señalar.

Así, disminuidos por las ideas, ante un equipo que prácticamente tampoco le aportó nada al espectáculo como lo fueron los Tigres, Junior se fue al camerino con la obligación de tener que resolver la papeleta en la segunda mitad.

Pese a los primeros minutos de emoción de los barranquilleros, que encontraron en Jarlan al más atrevido para intentar vulnerar el arco contrario, pronto la altura y el frío comenzó a pasar cuenta de cobro.

Junior se fue quedando ‘congelado’ en el campo de Techo, mientras que los Tigres, haciendo gala de su falta de contundencia, tocaba con insistencia la puerta de Veira, pero sin llegar a mandar la pelota al fondo.

 La confianza que se iba tomando el cuadro de casa era un arma de doble filo, pues mientras buscaba con insistencia la meta barranquilla, iba descubriendo los espacios en el fondo de su escuadra.
Así, Toloza aceleró a fondo en el último cuarto de cancha para mandar un centro al segundo palo donde aparecería Hernández para tratar de sentenciar el partido de mediavolea, tal como hace una semana.  

Pero esta vez, su disparo terminó saliendo por el costado de la portería custodiada por César Giraldo, cuando el cronómetro marcó el minuto 68.

El duelo iba avanzando, y poco a poco Junior mostraba su desgaste tras un partido donde corrió mucho, a pesar de haber generado pocas oportunidades claras de gol. En medio de esa falta de piernas para cerrar espacios, Miguel Pérez desbordó por izquierda que obligó a la estirada de Viera, que en el rebote vio cómo Rivas no alcanzaba a sacar provecho, a los 76.

Julio Comesaña quiso mover el banco y sistemáticamente fue mandando al campo a Michael Rangel, Robinson Aponzá y Jonathan Estrada, mientras que los bogotanos mandaron al campo a Yubernei Franco, para refrescar su ataque y allí tendrían la clave del triunfo.

A los 87 del compromiso, Franco aprovecharía un centro lanzado desde la izquierda para empujar la pelota ante la mirada cómplice de los defensores que no tuvieron como reaccionar tras todo el desgaste finalmente inútil de correr tras la pelota.

Tras los pocos minutos de adición, el central señaló el final de un partido muy aburrido, con un resultado peor de frustrante para las aspiraciones de los junioristas. Una derrota dolorosa que deja anclado a los barranquilleros en el fondo de la tabla, con apenas 10 puntos y dejando cada vez más remotas las posibilidades de avanzar.

En el próximo duelo, Junior se enfrentará ante local como Patriotas, en duelo programado para el 18 de abril. A mitad de semana se medirá ante Jaguares, en compromiso correspondiente a la Copa Colombia.