Claudymar Garcés junto a su madre Claudia Sequera.
Claudymar Garcés junto a su madre Claudia Sequera.
Foto
Jairo Cassiani

Share:

El desahogo de madre e hija venezolanas al ganar la medalla de oro en karate

Claudymar Garcés no pudo contener las lágrimas junto a su mamá al ser campeona en los Centroamericanos y del Caribe.

Lloraron, se abrazaron y se tomaron muchas fotos. En sus cabezas estaba todo el proceso difícil que tuvieron que vivir para llegar a la cima centroamericana.

Claudymar Garcés y su mamá, Claudia Sequera, son una dupla que vivió todo lo que pasa una entrenadora y su pupila, y en este caso de un vínculo más fuerte, de madre a hija.

La joven peleó la final de su vida en el tatami del coliseo del Colegio Marymount, en los Juegos Centroamericanos y del Caribe.

Su desempeño fue perfecto ante la dominicana Karina Díaz, campeona de la Premier League de Karate. Debía pelear así para ganarle y lo hizo con creces.

Claudymar Garcés (derecha) dominó a su rival de principio a fin.

Sin embargo, en su cabeza estaba todo lo que vivió desde niña para llegar a la cúspide del deporte. 

No se desconcentró, pero cuando pegó esa patada decisiva en los minutos finales, se quebró en plena pelea, las lágrimas asomaban y su emoción era desbordada. Sabía que la de oro ya estaba colgada en su cuello.

"La verdad es que se me vinieron muchas cosas a la mente. He pasado por muchas cosas para llegar acá y demostrar que pertenezco acá", indicó a Zona Cero

"Demostrar todos los entrenamientos, todas las veces que lloré y que no quise seguir. Se me vino todo eso a la mente y valió la pena", agregó entre lágrimas.

Claudymar Garcés posando con su medalla de oro centroamericana.

Expresó que su rival era una experimentada, un hueso duro que pudo roer con una templanza imponente. La derrotó 9-5. 

"Ella es una contrincante con bastante experiencia. Es una competidora de muchos años. Campeona de la Premier League de Karate y la verdad es que es muy fuerte, pero gracias a Dios me salió bien todo y pude vencerla", indicó.

Sin embargo, ante la consulta por su proceso para llegar a las justas de Barranquilla 2018, volvió a quebrarse. Tanto, que hasta tuvo que pedir disculpas en un momento porque simplemente no le podían salir las palabras de su boca.

"Pasé por muchas cosas para poder estar acá y se me viene todo eso a la mente. Si deseas tanto algo, el mundo conspira para que pase", sostuvo.

Claudymar se defendió como una fiera ante la dominicana Karina Díaz.

"Hay que trabajar para esto. Dejar todo, así tengas muchas trabas, tienes que seguir hasta lograrlo", añadió con varias lágrimas en sus mejillas. 

Reconoció que le tocó la zona dura de la competencia. Incluso, se quitó de encima a una deportista que era local, la colombiana Stefany Medina.

"Así la medalla pesa más", puntualizó sonriente, pero aún con sus ojos llorosos.

Sangre guerrera

No obstante, mientras hablaba con Zona Cero, su mamá, Claudia Sequera, estaba a un lado llorando también con una bandera de Venezuela en sus manos.

"Siento una gran emoción porque eso que está viviendo ella, lo viví yo en campeonatos mundiales y panamericanos. Sé lo que cuesta llegar allí y lo que hay que trabajar y llorar", afirmó la mujer. 

En la sangre de Claudymar corre sangre de karateca y sobre todo de una guerrera que, cuando sube a la plataforma, se quiere "comer" viva a sus rivales.

Claudia Sequera es la única mujer campeona mundial de kumite adulto que tiene Venezuela.

Claudymar parando con su mano una patada de parte de Karina Díaz.

"Lo que se perservera, se logra. Este es su momento, gracias a Dios", agregó con lágrimas en sus ojos.

Reveló detalles del difícil proceso que vivió con su hija para verla en el podio, colgando una medalla de oro.

"Recaudar dinero, pedir patrocinios en empresas, en tiempo pasado haciendo colectas y los institutos y la familia han colaborado", indicó la también entrenadora de su hija.

Agradeció el apoyo del Ministerio del Deporte y a la Federación Venezolana de karate, que las ayudaron para venir a competir a Barranquilla.

La gloria no termina

Claudymar no tiene techo. Sabe que su nivel da para más y desde ya tiene metas fuertes en su cabeza para seguir cosechando medallas y títulos.

"Ahora viene la Premier League, la Serie A de Chile y el campeonato mundial adulto, que ojalá me lleven", finalizó.

Claudymar Garcés no pudo contener las lágrimas al hablar de su proceso.

Más sobre este tema: