Con 90 jugadores en diferentes categorías, se cumple en la ciudad la primera edición del Barranquilla Open de raquetbol, el cual busca dinamizar el crecimiento de este deporte en la ciudad y que busca tener un perfil internacional de cara al futuro. 

Buscando consolidar la herencia deportiva dejada por los pasados Juegos Centroamericanos y del Caribe, los clubes Pro de racquetball y Killa Racquetball se jugaron la ficha de crear un torneo propio para darle relevancia a esta disciplina en el departamento y transformar a la ciudad en la capital nacional de este deporte a futuro.  

“Estamos organizando este torneo con el aval de la Liga del Atlántico y con el apoyo de la Federación Colombiana y de la Alcaldía de Barranquilla. Se llama el Barranquilla Open, que es un torneo que a futuro va a  ir creciendo desde el punto de vista internacional”, explicó Edgardo Pantoja, vicepresidente de la liga de este deporte en el Atlántico. 

El torneo se está jugando a diferente niveles, desde los más pequeños, hasta con jugadores de élite. A pesar de ser su primera versión, participantes se han reportado desde países vecinos para tomar parte del evento. 

“Se está jugando en diferentes categorías y en diferentes niveles de juego. La categoría open está muy activa, con alrededor de 10 participantes entre dobles y sencillos. Tenemos participantes de Ecuador y de Venezuela”, explicó. 

Para el desarrollo del torneo, la Liga cuenta con el complejo Set Cubillos Ruiz, el mejor de toda la Región Caribe y uno de los mejores de toda Colombia, la cual da prenda de garantía a los jugadores. 

“Ese es un legado que nos dejó los Juegos Centroamericanos. Un escenario totalmente equipado para grandes torneos. La mejor manera de darle vida es que esté muy activo. Todos los meses buscamos crear buenos torneo. Muy pronto vamos a tener grandes campeones”, cerró Pantoja. 

Desde ya la Liga viene preparando intercambios con clubes de Ecuador y Panamá para el próximo año, para seguir impulsando la práctica de este deporte que ya cuenta con decenas de niños inscritos en las escuelas de formación que hay en la ciudad.