La revista Forbes en 2017 clasificó como  la tercera fortuna mundial a la de Warren Edward Buffett, con 75.600 millones de dólares. El multimillonario en una entrevista con CNN en el 2005 dijo textualmente: “It's class warfare, my class is winning, but they shouldn't be”.¹ - Es una guerra de clases, mi clase está ganando, pero no debería ser-. Es inimaginable escuchar tal declaración en la boca de las elites colombianas, como también pretender que en el país no hay lucha de clases. También es impropio acusar a quienes denuncian la profunda desigualdad en el país, de fomentar el odio.

Si la polarización política se muestra exacerbada es porque la palabra se libera y la opinión púbica comienza a hacerle frente al miedo. Tal contradicción no es una simple pendencia de ideas, sino de hechos. La miseria y el hambre persisten, lo cual se constituye en una violencia social autófaga, que en el campo colombiano se agrava con los asesinatos en crecimiento de líderes sociales, de militantes de izquierda, de defensores de derechos humanos, de dirigentes pro sustitución de cultivos ilícitos, y de reclamantes de las tierras despojadas, contabilizando 99 asesinatos en lo que va del año.

Un consenso transversal, sin embargo, subsiste en la relativa confianza al referendo. El uribismo lo agita, para apoyar la reforma que la derecha le quiere hacer al acuerdo de paz pactado entre el gobierno Santos y las FARC (confirmando de paso sus intenciones de romper este proceso). Ahora bien, el referendo visto del lado del progreso ofrece, sin duda, una oportunidad de probar los alcances de la democracia participativa, mayormente, cuando están en juego asuntos cruciales para la vida del país, siendo que a priori es mucho más perentorio la vida de los propios  habitantes, de la fauna y de la flora y sobre todo, considerando que Colombia es el segundo país más mega diverso del mundo. Me refiero al fracking y a la autorización de la aspersión del glifosato en los sembradíos de coca.

El fracking y sus peligros², de una parte y de otra la aspersión del glifosato, producto potencialmente cancerígeno, según la Organización Mundial de la Salud y seguramente mortal para el principal vector de la polinización como son las abejas, nos pone en riesgo a todos: ricos y pobres, que seamos de izquierda o de derecha, por lo que propiciar un referendo para decidir en democracia estos temas es un derecho más que legítimo. Estas dos proposiciones refrendadoras en un solo proyecto, si parten de la sociedad civil, no tendrían el inconveniente de la personalización, lo que prestaría el flanco a la propaganda negra, como la que actualmente afecta la consulta anti-corrupción. Si prosperan estas dos iniciativas su carrera no sería fácil, pues en efecto, la Constitución de 1991 no le permitió al pueblo la auto-convocatoria para referendos, necesitando por lo tanto, de la aprobación del Congreso, no obstante sería la ocasión de comprobar la consecuencia de los que alegan el respeto de la voluntad popular. Advirtiendo que los intereses de muchos congresistas y del nuevo presidente elegido se confunden con el fracking y con los requerimientos norteamericanas en favor de las fumigaciones con glifosato ante el crecimiento de los cultivos ilícitos. Habrá que contar con la movilización ciudadana y combinarlas con el apoyo institucional de las gobernaciones y alcaldías progresistas.

Las consultas electivas tienen, incuestionablemente, sus costos. En lo que concierne al fracking, las multinacionales extractivas invierten millones de dólares en la exploración, como la sísmica entre otras, lo que no deja de ser aleatorio, puesto que a veces arroja resultados negativos. Dentro de sus gastos, no estaría de sobra exigirles una mayor compensación fiscal disminuyéndoles exenciones, así como exigirles una mayor contribución a los países consumidores de drogas quienes son tan responsables de este cáncer social como los países productores. De todas las maneras, la salud no tiene precio. Este es un referendo por la vida.

1°. http://www.cnn.com/2005/US/05/10/buffett/index.html

2°.  http://zonacero.com/?q=opinion/energias-oscuras-contra-energias-verdes-103797