Tres de los imputados por el caso.
Tres de los imputados por el caso.
Foto
Jairo Cassiani

Share:

"Uno de los secuestradores hablaba por celular y preguntaba que si me llevaban a mí"

El jueves será la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento.

Poco antes que la Fiscalía imputara cargos contra Jehnier José Suárez Marín, alias 'Muñeco Sucio'; Hernando Luis Díaz Pérez, José Luis Mendivil Peña y José Gregorio Blanco por el secuestro de Rodolfo 'Fito' Acosta y su esposa, el pasado 31 de agosto, la representante del ente acusador reveló el relato que entregó la compañera sentimental del empresario al Gaula de la Policía para así poner en contexto a los imputados de cuál era el hecho exacto por el que habían sido capturados.

La mujer relató que el día de los hechos se movilizaba en compañía de su esposo en una camioneta blindada de su propiedad con rumbo a una bodega que tienen en la Circunvalar, a la altura del barrio El Pueblo.

Al llegar a la carrera 53 con Circunvalar había dos 'policías' realizando un retén y allí mismo estaba un carro gris parqueado.

"Los uniformados nos hicieron el pare y uno de ellos era moreno, grueso. Nos pidieron los papeles. Cuando mi esposo le entrega los documentos encima del vidrio nos piden una requisa y es cuando se lo llevan a él en la parte de atrás del vehículo. Llegaron dos tipos más y otro policía falso. Se montaron a la camioneta y nos dijeron que se trataba de un secuestro", indica aparte del relato de la esposa del empresario y que fue leído por la Fiscal ante el Juez Segundo Penal Municipal de control de garantías.

La mujer precisó que los sujetos los obligaron a que se agacharan y logró darse cuenta que cogieron la Circunvalar hacia el sur y luego cruzaron hacia la vía que conduce a Juan Mina, donde les hicieron transbordo en otro vehículo en una trocha cercana a un basurero.

"Cuando estábamos por la trocha el policía hablaba por un celular y preguntaba que si a mi me llevaban también. Hicimos un recorrido de unos 20 minutos hacia la carrera 38 con Circunvalar. Sentimos cuando abrieron una estera de un garaje, nos bajaron unos escalones y nos metieron a un cuarto oscuro. El lugar tenía ventanas tapadas con periódicos", precisa el relato

En ese relato la mujer señaló que había unos hombres que les decían que debían esperar a que llegara el jefe de ellos.

"Rodolfo estaba esposado y teníamos calor. Nos trajeron agua y nos colocaron un abanico nuevo. Digo que nuevo porque allí estaba la caja del abanico".

Pasado el mediodía llegó al sitio el supuesto jefe, de edad aproximada de 65 años, delgado, de mala postura y de acento costeño.

El hombre se hizo pasar como miembro de una supuesta banda denominada como 'Oficina de Cali' y le preguntó a la pareja de esposos que cuánto estaban dispuestos a pagar por sus vidas. Fue en ese momento en que el supuesto jefe pidió la cifra de 5 millones de dólares para dejarlos libres.

"Mi esposo pidió que le quitaran las esposas y se las quitaron con un punzón, porque el policía no había dejado las llaves. Él les dijo que me dejaran ir a mi porque andaba mal del corazón".

La declaración de la esposa del empresario y leído por la Fiscal también indica que "a las 5 de la tarde llegó de nuevo el jefe de todos diciendo que la Policía había encontrado la camioneta de nosotros y nos recordó de la plata. Que si queríamos quedarnos con ellos 6 meses o un año. Mi esposo les insistió que me dejaran ir y el jefe en un pasamontaña me entregó un celular para que me comunicara con ellos".

La mujer iba a ser liberada para que realizara el trámite para conseguir la plata para liberar al esposo.

"Me sacaron con gafas oscuras. Me montaron en un carro más amplio, salió a la calle y me dieron muchas vueltas como para que no supiera donde estaba. Después de 45 minutos nos estacionamos en la calle 65 con carrera 28 para que cogiera un taxi. Caminé hasta la calle 64 donde había una venta de minutos y llamé a mi hijo. Allí llegó él y unos del Gaula. Me llevaron al comando de la Policía donde me entrevisté con el General del Gaula y el General Botero", precisó la mujer.

Al día siguiente, el 1 de septiembre, la mujer salió con varios investigadores del Gaula a recorrer la zona por donde fue llevada ella con su esposo en los vehículos para así tener más pistas del paradero del empresario, pero en ese momento la mujer recibió una llamada de su hijo diciéndole que su esposo había llegado en un taxi a la casa, en el norte de Barranquilla.

La Fiscal, tras ese relato, explicó el rol que habría tenido cada uno de los imputados tras información obtenida de un testigo que las autoridades tienen en reserva por seguridad.

Para el próximo jueves, a las 2:30 de la tarde, está programada la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento.