Luz Marina Bautista, madre de Sandra Milena y abuela del pequeño.
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Hansel Vásquez.

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“Abuela, el marido de mi mamá le metió un tiro en el ojo y la mató”

Testimonio de un niño de 5 años esclarece crimen de mujer en Palermo. Hace cinco días el asesino arrodilló a ese menor y estuvo a punto de dispararle.

Hace 13 años el Instituto Colombiano Bienestar familiar le retiró a Sandra Milena Ruiz Bautista la potestad de uno de sus hijos mayores, dado que la mujer no tenía forma de mantenerlo ni ocuparse de su educación.

Con los años ese hijo, que ya tiene 17 años, fue adoptado por una familia en Holanda, desde donde el menor seguía en contacto con su madre, a quien le enviaba dinero para que pudiera hacer una casa para ella, sus otros 7 hermanos y su actual pareja, en el corregimiento de Palermo, Sitionuevo, Magdalena.

Este viernes, en esa casa de material se vivió una escena de terror por cuenta del asesinato a sangre fría de Sandra Milena, de 35 años, precisamente por su pareja, un hombre identificado como Jesús Zárate.

La sindicación del homicidio viene por cuenta de uno de los pocos testigos en la casa al momento del crimen: el hijo de cinco años de Sandra Milena, según relata la madre de la occisa y abuela del pequeño, Luz Marina Bautista.

“Mi nieto pequeño me dijo anoche: ‘no abuela, él le metió un tiro a mi mamá aquí (señalando a la altura del ojo) y se salió acá (poniendo el dedo sobre la nuca) que es donde ella lo tiene”, explicó Luz Marina a las afueras del edificio de Medicina Legal, donde se encuentra tramitando la entrega del cuerpo de Sandra Milena.

Según el relato de la señora Bautista, hace tiempo que sabía que su hija tenía problemas de convivencia con Jesús Zárate, quien con un arma de fuego desde hace varios días venía intimidando a su mujer y los hijos de ésta. 

Sandra Milena (recuadro) vivía en esta casa del corregimiento de Palermo.

“Ellos discutían, pero la realidad es que no sé qué pasó ayer. Hace cinco días, también cogió a mi nieto, el que tiene cinco años, y también me lo iba a matar. Lo arrodilló y dijo que le iba meter un tiro, pero el pelaito salió corriendo para la calle”, explicó Luz Marina, quien aseguró:  “no sé de dónde sacó ese revólver”.

Bautista declaró que para ella el asesinato estuvo planeado, pues el hombre primero compró droga en Barranquilla para bajo los efectos de esta cometer el homicidio.

“Lo único que no consumía era patra. Él tenía su hecho pensado. Compró un cartón de pepas y se lo tomó y esperó cinco minutos y cogió para allá”.

Tras dispararle, Zárate rápidamente fue hasta donde una tía de Sandra Milena a advertirle que personas desconocidas habían atentado a bala contra ellos y que ella llevó la peor parte.

“Ve, llama a la ambulancia que se nos metieron y nos levantaron a tiros y le dieron fue a Sandra”, dijo el asesino, según el relato de Luz Marina.

No fue sino hasta entrada la noche, cuando Sandra ya había fallecido, que su pequeño nieto se acercó hasta ella y le contó la verdad: había sido un disparo efectuado por parte de Jesús Zárate y que le impactó a la altura del ojo, para luego salir por la parte posterior de la cabeza, tal y como estaba la herida presente en el cuerpo de la mujer.

“Yo pido es que me hagan justicia, porque Sandra no era mala. Ella deja un poco de pelaos pequeños: una niña de dos años, una de tres, una de cuatro. Yo lo que digo es que se haga justicia”, clamó Luz Marina.

Producto de la relación entre Zárate y Ruiz habían nacido las dos hijas menores de la mujer. Ella convivía en su hogar con otros seis hijos de una relación anterior.

Mientras, Jesús Zárate sigue prófugo de las autoridades que ya iniciaron una búsqueda para tratar de dar con su paradero, pues se cree que el sujeto es peligroso.

Por el momento, la familia de la mujer espera la entrega del cuerpo para poder darle cristiana sepultura y tratar de sanar la herida que les dejó a sus pequeños hijos la pérdida de su madre a manos del hombre que ella había escogido para vivir,  así como en la película 'Durmiendo con el enemigo'.