Yuliana Sanguino, madre de Albertico Cardona, después de un año de su desaparición.
Yuliana Sanguino, madre de Albertico Cardona, después de un año de su desaparición.
Foto
Óscar Mejía- Seguimiento

Share:

La desaparición de Albertico: entre los recuerdos de su madre y el olvido de las autoridades

Su mamá, Yuliana Sanguino, asegura que la Policía ni ninguna otra autoridad le brinda acompañamiento. Siente que su hijo fue olvidado en la Sierra Nevada.

Una foto y una camisa son el recuerdo que Yuliana Sanguino tiene de su hijo menor Alberto Cardona Sanguino, conocido cariñosamente como ‘Albertico’.

Sentada en una silla y con el portarretratos en sus manos, la mujer recuerda con tristeza cómo, hace un año, se enteró de la desaparición del menor que en ese entonces tenía seis años.

El caso del pequeño Albertico Cardona Sanguino es un auténtico misterio. El menor desapareció junto con su padre, Alberto Cardona Tapia, el jueves 20 de septiembre en la vereda Tigrera, jurisdicción de Minca, en estribaciones de la Sierra Nevada de Santa Marta.

Posteriormente, el adulto fue encontrado sin vida el lunes 24 de septiembre, pero del menor nunca (y hasta el momento) no se volvió a saber nada.

Así se enteraron de la desaparición de padre e hijo

Yuliana Sanguino y Alberto Cardona Tapia fueron pareja y de esa relación nacieron tres pequeños: Jesús David, Ramón de Jesús y Alberto Ramón. La mujer, sin embargo, es madre cuatro niños en total, pues tiene un hijo mayor: Luis Samuel.

Cuando Sanguino y Cardona Tapia dieron por terminado en 2016 el vínculo amoroso que los unía, al parecer, según cuenta la mujer, las cosas no quedaron de la mejor manera y, en ese sentido, el hombre decidió quedarse con los tres pequeños.

Yuliana Sanguino, que actualmente reside en el barrio Los Alpes de Santa Marta, aseguró en diálogo con Seguimiento.co que “cuando yo me iba a venir del todo para acá, me los iba a traer (a los cuatro niños), pero él (Alberto Cardona) me arrebató de los brazos a los tres, nada más me dejó al niño mayor”.

Tras la separación, Cardona Tapia envió a Jesús David y a Ramón de Jesús a estudiar en el Internado de Minca. Eso permitió que Yuliana, a escondidas, pudiera visitarlos y saber cómo estaban. Aunque, de Albertico, solo podía tener información preguntándole a sus otros dos hijos pues, presuntamente, el padre no le permitía ni siquiera acercarse.

La mujer detalló que, precisamente, fueron Jesús David y Ramón de Jesús los que notaron que algo extraño sucedía, puesto que el viernes 21 de septiembre, al ser fin de semana escolar, bajaron de Minca hasta la finca donde trabajaba y vivía su padre, pero al llegar los menores no encontraron a nadie.

“Jesús David y Ramón de Jesús estaba internados en Minca. Cuando ellos bajaron de allá, que fueron a buscar ropa donde el papá, ya no los encontraron. Si hubieran estado los cuatro ese día, a todos cuatro los desaparecen”, relató con tristeza Yuliana.

Al verse solos, de acuerdo con la mujer, los niños decidieron irse a una finca vecina, donde pasaron unos días. “Ellos se fueron para donde un vecino y ahí demoraron como dos o tres días, pero ellos iban donde el papá a ver si ya había llegado. Entonces, una comadre mía en Tigrera se dio cuenta porque ellos bajaron allá a hacer un mandado y les preguntaron qué pasaba y ella (la comadre) no los dejó subir más y ahí fue cuando todos nos enteramos”, explicó Sanguino.

“Quien se enteró primero en mi familia fue un tío, que llamó después a una tía y esa tía me llamó a mí y me dijo lo que estaba pasando. Ahí fue cuando yo empecé a llamar para Tigrera y me contaron que había desaparecido Alberto (Q.E.P.D.) y el niño. Entonces, yo me fui para Tigrera”, expresó la mamá de ‘Albertico’, quien sostuvo que de no haber llegado ese día al lugar de los hechos, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) se hubiera llevado a Jesús David y a Ramón de Jesús.

Ya con la noticia de la desaparición y los llamados de ayuda, los organismos de socorro acudieron a la zona y con apoyo de la comunidad encontraron el cuerpo de Alberto Cardona Tapia, que yacía a un lado del río que pasa por la zona. De acuerdo con algunas versiones, el cadáver de Cardona Tapia presentaba dos impactos de bala.
 

Yuliana Sanguino, en entrevista con Seguimiento.co.

La búsqueda infructuosa de ‘Albertico’ Cardona

Tras el hallazgo sin vida de Alberto Cardona Tapia, se cumplieron sus exequias. Sin embargo, había algo pendiente para las autoridades: dar con el paradero de ‘Albertico’ Policía, Defensa Civil, familiares y el resto de la comunidad se pusieron a la tarea de dar con el sitio donde podría estar el menor, por quien se ofreció hasta $70 millones de recompensa.

Pero, infortunadamente todo esfuerzo hasta la actualidad ha sido en vano. ‘Albertico’, un año después, no aparece. No se sabe nada de su paradero. Es como si la mismísima tierra se lo hubiera ‘tragado’.

El presente de una madre que sufre por su pequeño

365 días después, en medio del dolor que le ocasiona no saber sobre su hijo menor, Yuliana Sanguino reconoció que no cuenta con la ayuda de nadie, ni siquiera de la Policía, pero en su corazón guarda la esperanza de hallarlo sano y salvo.

“Me dicen que de pronto lo sacaron, y lo echaron para Venezuela y otros me dicen que de pronto lo mataron y lo enterraron. Pero, como mamá, yo siento que el niño está vivo, yo creo que sí lo sacaron y se lo llevaron”, dijo Sanguino.

Con la mirada triste y enfocando el horizonte que se divisa desde el barrio Los Alpes, Yuliana recuerda cómo fue el tiempo en que ‘Albertico’ vivió con ella. “A él le gustaba mucho jugar; en el juego, a veces le pegaban sus hermanos y él me ponía las quejas. Para donde yo iba, él iba conmigo y si yo lo dejaba y le decía: ‘papi, quédate aquí’, él se ponía a llorar”.

Adicionalmente, Yuliana detalló que los hermanos de ‘Albertico’ suelen recordarlo y, en varias ocasiones, los ha consolado, pues sufren por la ausencia del más pequeño.

“Ramón a veces me pregunta: ‘mami, ¿y el niño?’ y yo me pongo a hablar con él, y él se pone a llorar. Él era el más cercano a ‘Albertico’, siempre jugaban juntos. Mis otros hijos también se acuerdan del niño, se ponen por ahí solos a jugar y cuando los veo, están llorando, pero no les gusta decirme por qué lloran”, indicó la mujer.

Ha sido un año lleno de mucha zozobra, de dolor y angustia por no tener idea de la suerte de su pequeño hijo, pero Yuliana tiene claro que, si la vida le permite disfrutar de nuevo de ‘Albertico’, lo llenaría de amor y le daría todo lo que en este tiempo no ha podido.

“Si lo vuelvo a tener en mis brazos lo abrazaría, lo llenaría de amor porque ha sido un año difícil sin él, sin saber dónde está. Y si alguien lo tiene, le pido que me lo regresen pronto, sano y salvo, que no me le hagan nada”, puntualizó visiblemente triste Yuliana Sanguino.