Daniela Lizeth Mendinueta fue dada de alta y ya se encuentra en su casa, en el Difícil. Foto cedida con autorización de su padre.
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Elcer Mendinueta

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Después de estar al borde de la muerte, la niña Daniela ya está de vuelta en su casa

Salvó su vida gracias a la campaña #AyudemosADaniela impulsada desde Zona Cero. Con su extraño caso “están aprendiendo en el Mundo”.

Al fin, después de 7 meses y 9 días viviendo en un hospital en Medellín, la pequeña Daniela Lizeth Mendinueta estuvo lo suficientemente estable como para que el personal médico del hospital universitario Pablo Tobón Uribe le diera de alta.

A Daniela y a Elcer, su papá, los empleados del Pablo Tobón –quienes la sintieron como parte de su familia– los embarcaron en un avión que voló el 9 de febrero desde la capital de Antioquia hacia Santa Marta. Allí, abordaron un transporte intermunicipal y regresaron su hogar en zona rural del municipio de Ariguaní. Después de tanto tiempo, Daniela se reencontró con sus hermanitos y sus abuelos.

La última vez que la vieron sus familiares, Daniela, de 9 años, estaba al borde de la muerte. Un extraño hongo que se le había manifestado cuando apenas tenía 6 años le carcomía el rostro a la pequeña y su papá, en una medida desesperada para encontrar una salida espiritual después de haber abandonado la asistencia médica, se fue con una congregación religiosa hacia Sincelejo para hacerle una misa de sanación.

Pero allá, uno de los feligreses que era profesional de la medicina se dio cuenta que Daniela necesitaba atención urgente, por eso la llevaron al hospital San Francisco de Asís, desde donde empezó una batalla infructuosa contra la EPS Comfacor para lograr que la trasladaran a un hospital de IV Nivel con los recursos necesarios para salvarle la vida.

A través de Zona Cero se inició una campaña a través de redes sociales denominada #AyudemosADaniela, a la que se vincularon miles de personas pidiendo a las autoridades competentes que se gestionara el traslado de la menor. Fue así que el ICBF, la Defensoría del Pueblo, la Superintendencia de Salud y la Gobernación del Magdalena se pusieron de acuerdo para garantizar el traslado de la menor al hospital Pablo Tobón Uribe, que le abrió las puertas para recibirla.

Una vez con la niña a salvo y tras una minuciosa investigación, la Superintendencia de Salud sancionó a la EPS Subsidiada Comfacor por negligencia al no autorizar el traslado de la niña a tiempo.

Un extraño caso con riesgo aún latente

La situación de la pequeña Daniela es mucho más complicada de lo que parece. Durante todos estos meses, un grupo de especialistas inmunólogos de Francia fueron informados sobre la rara enfermedad de la menor y comenzaron estudios para conocer los alcances que puede llegar a tener.

Según informó un miembro del personal médico que estuvo haciéndole seguimiento al progreso de la niña, Daniela nació con una inmunodeficiencia que la predisponía a infectarse de bacterias extrañas y, con los años, un extraño hongo denominado corynespora cassiicola se hospedó en su zona facial y comenzó a expandirse, destruyendo todo lo que se encontraba a su paso.

La situación era tan compleja, que mientras estuvo hospitalizada, el hongo hacía resistencia incluso a las drogas más potentes para tratarla. Sin embargo, los especialistas del hospital Pablo Tobón lograron controlar el avance del hongo y salvaron gran parte de su cara.

Gracias a un implante, Daniela incluso pudo comenzar a alimentarse por su propia cuenta.

Ahora que está de alta, el padre de Daniela tiene la responsabilidad de viajar mensualmente con su hija a Santa Marta para los respectivos controles médicos y para reclamar las drogas que deben suministrarle a la menor.

Aunque aún hay un riesgo latente de que la situación de Valery se agudice en un futuro, por el momento, su vida está a salvo.